El proyecto de ley que declara la emergencia cultural en la provincia de Salta no está incluido entre los temas que los diputados tratarán en la sesión de hoy. Tras esa notificación, el diputado de la Unión Cívica Radical y autor del proyecto de ley, Héctor Chibán, denunció que no se respetaron los acuerdos políticos para su tratamiento pese a las modificaciones a las que se accedió. 

“En un claro incumplimiento a un acuerdo político que hicimos en el marco de la Comisión de Legislación. El oficialismo no incluyó dentro del orden del día este proyecto”, reprochó el diputado radical. Contó que se había llegado a un consenso sobre algunas modificaciones en el proyecto para que de esa manera pueda ser tratado en la sesión de hoy.

El principal cambio, y quizás el más preocupante para el oficialismo, tenía que ver con que originalmente el proyecto estipulaba que todos los trabajadores de la cultura recibirían una renta mensual mínima equivalente a un salario mínimo, vital y móvil. Chibán afirmó que este punto quedó desestimado en el nuevo texto y que sólo accederían a una remuneración quienes no hayan percibido otros beneficios nacionales o provinciales.

Dicho pago sería equivalente a un tercio de un salario mínimo, vital y móvil, es decir, un monto superior a $5.600. Además, se dejó dispuesto que quienes perciban el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) se les otorgará mensualmente un módulo alimentario.

Para el diputado fue preciso aclarar que el costo económico que podría tener la implementación del proyecto sería entre 4 y 5 millones de pesos por mes, lo que equivaldría a valrededor de 20 millones de pesos en lo que resta de 2020. “Es un monto insignificante si vemos que estamos conteniendo y reactivando a un sector importantísimo de la sociedad y la economía de Salta”, destacó al hablar con Salta/12.

Las modificaciones las trabajaron el autor del proyecto junto al diputado Santiago Godoy, quienes acercaron posiciones entre los referentes culturales y los legisladores oficialistas hasta lograr el texto que supuestamente iba a tratarse hoy.

Otro de los puntos que quedó afuera con las modificaciones fue la afiliación de los artistas a la obra social del Instituto Provincial de Salud (IPS).

En tanto, el punto que se sostuvo de la versión original refiere a otorgar una adhesión al régimen de “tarifa social” de los servicios públicos de energía eléctrica, agua y gas, "a cada artista, o a la persona con la que él o ella conviva y sea titular del servicio público en cuestión”.

La iniciativa de ley también propone el “derecho a grabar” un espectáculo una vez al mes por una plataforma de streaming que la Provincia deberá proveer. También establece el “derecho a actuar en teatros y salas de gestión pública sin obligación de pago de la contraprestación a cargo del artista; y la provisión de todos los insumos de bioseguridad necesarios”.

Para Chibán, que no se hayan respetado los acuerdos resulta “un acto de extrema gravedad” puesto que “la política necesita de relaciones de confianza”. En ese sentido, señaló que desde distintos espacios opositores a la gestión de Gustavo Sáenz se “acompañó todas las iniciativas que el Ejecutivo ha presentado en la Legislatura en carácter de emergencia”. Recordó la declaración de emergencia sanitaria presentada en febrero y la reciente sobre la emergencia del turismo en la provincia.

“No son pocos los proyectos que hemos acompañado y este proyecto amerita ser tratado con urgencia”, reclamó. Explicó que el sector de la cultura “no ha podido trabajar” desde la pandemia y aún continúan en la misma situación. “Esto no es una cuestión electoral sino que es una cuestión de política pública y de Estado”, subrayó. Este medio intentó contactarse con el diputado oficialista y presidente de la Comisión de Cultura, Luis Albeza, pero no obtuvo respuesta.

Chibán indicó que seguirá pujando junto a sus pares para que ingrese al recinto. “Ya hemos flexibilizado bastante el texto a fin de lograr su tratamiento, pero resulta increíble que se incumpla el compromiso político que se asumió porque le resta credibilidad al gobierno de la provincia y al oficialismo en la Legislatura”, advirtió.

“Cada vez más grave”

Por su parte, la actriz y humorista Graciela “La Quipi” Quipildor manifestó a Salta/12 que la situación de los artistas de Salta “es cada vez más grave”. En esa línea dijo que quienes están “más complicados” son los trabajadores del interior de la provincia, como ser los artesanos, quienes se encuentran sin insumos y sin sus principales compradores que vienen del turismo nacional e internacional. “No venden porque el salteño no compra, porque el que compraba era el turista”, graficó.

En referencia a los artistas de teatro, sector del cual forma parte, dijo que siguen “sin espacios donde hacer lo nuestro”. Si bien la habilitación de los bares permite brindar espectáculos, no están acondicionados para disciplinas como el teatro, ejemplificó.

Además, “los bares no te pagan porque apenas pueden pagar a sus empleados” debido a la reducción de mesas y a la venta que esto implica. Agregó que el propio consumidor “tampoco tiene plata” para pagar entrada ante una crisis económica y social. Por eso, aclaró que en menor medida quienes pueden usar esta habilitación de trabajo en espacios gastronómicos son los músicos.

“La verdad, es angustiante todo porque estamos viviendo una crisis y a los funcionarios no les parece que es una emergencia. No lo termino de entender”, declaró la humorista.

Cuestionó que las habilitaciones, con las nuevas restricciones que rigen desde el 23 de agosto, aún contemplen la reunión de cultos religiosos y el funcionamiento de los bares, pero no así los teatros. “Hay menos contagios y es más fácil de cumplir los protocolos dentro de un teatro que en un bar o una iglesia”, argumentó. “A la hora de presionar está la iglesia y el resto de los trabajadores quedamos fuera. Nos da mucha impotencia”, sostuvo.

Con la mirada puesta en el futuro, la actriz se preguntó: “¿qué van a vender de cultura?” cuando se retomen las actividades. Dijo que las producciones artísticas hoy ni mañana van a tener plata para invertir por lo que representa “un golpe grande para la provincia”.

Criticó que siendo un gobierno que se jacta de tener una diversidad cultural artística enorme, no dé tratamiento al proyecto de ley de emergencia o no genere políticas inmediatas. “Están dando un paso en falso”, advirtió. 

Según el registro de la Secretaría de Cultura de Salta, los trabajadores del sector son más de 4500. Quipildor dijo que en una de las últimas reuniones que tuvieron con la secretaria Sabrina Sansone, se le solicitó que se haga llegar el registro a las comunidades del interior que no cuentan con conectividad para inscribirse.

Por su parte, Santiago Barnech, miembro del Centro Cultural Pata Pila e integrante de la Multicultural de Salta, manifestó su preocupación ante la crisis que viene enfrentando el sector cultural. Aseguró que se mantuvieron distintos encuentros con Sansone en las que “hubo propuestas pero no acciones concretas que realmente aborden la situación que estamos transitando”. Por ello, señaló que la “emergencia cultural es una urgencia inmediata”.

A pesar de las medidas nacionales que van desde el IFE hasta las convocatorias como el Sostener Cultura del Ministerio de Cultura de Nación, Barnech dijo que terminan siendo “insuficientes” por lo que considera necesario que “la provincia deba poner su parte”. Para ello, proponen que se organice una mesa de trabajo ejecutiva que integre al organismo provincial junto a las organizaciones y asociaciones de la cultura.