Desde Santa Fe
El jefe de la Policía de Santa Fe, Víctor Sarnaglia, no volverá a ocupar su cargo en el que solicitó licencia para declarar hoy ante los fiscales de Rosario que investigan una red del juego clandestino en la provincia con protección policial y judicial. El gobernador Omar Perotti ya tomó la decisión política de aceptarle la renuncia, según confirmaron a Rosario/ 12 tres fuentes de la Casa Gris. Ayer, muy temprano, Perotti recibió en su despacho al senador nacional Roberto Mirabella y luego al propio ministro de Seguridad, Marcelo Sain, con quien tiene un diálogo cotidiano –en la Casa de Gobierno o por teléfono-, desde que los fiscales Matías Edery y Luis Schiappa Pietra comenzaron a descubrir el blindaje del juego ilegal que derivó en la detención del ex fiscal regional de Rosario, Patricio Serjal y de su mano derecha, el fiscal Gustavo Ponce Asahad, en una semana. “Sarnaglia no vuelve más a su puesto”, coincidieron las fuentes.
El miércoles, Perotti había dicho que Sarnaglia solicitó la licencia para preparar su declaración de hoy ante los fiscales “frente a esta instancia de público conocimiento”. Así llamó el gobernador a una prueba que encontraron Edery y Schiappa Pietra: las anotaciones de un empresario arrepentido con el destino de las coimas y uno de los destinatarios de los supuestos pagos es un tal “Sarna”. Sarnaglia planteó “su deseo de defender su honor y su conducta. Nos pidió autorización para presentarse ante la justicia y, obviamente, le dijimos que sí, que proceda de esa manera. Es lo que se ha hecho”, dijo Perotti.
Pero ayer, la relación que ya era tensa entre Sain y Sarnaglia, se rompió. El detonante fueron cuatro audios en la web que se atribuyen al jefe de Policía de la provincia, dirigidos a uno de sus amigos, a quien llama “loco”. En los chat, Sarnaglia se desliga de los hechos que investigan los fiscales de Rosario, dice que “no tiene nada que ver”, le tira a Sain y adelanta que su declaración judicial será un trámite. “Si esto se aclara, yo vuelvo. El lunes estoy de vuelta en mi cargo. Y ahora vamos a saber quién manda”, desafío.
El gobernador ya estaba al tanto de los mensajes de Sarnaglia al “loco”, cuando ayer se reunió en la Casa Gris, primero con el senador Mirabella y luego con el ministro Sain. Y a partir de ahí, lo que ya era un secreto a voces, una fuente del gabinete lo sintetizó ante en una línea: “Sarnaglia no vuelve más a su cargo”.
-¿Sarnaglia no vuelve? –insistió este diario.
-Confirmado. Al Ministerio de Seguridad no vuelve –ratificó la fuente.
La ruptura se aceleró por esa provocación pública al ministro y al propio gobernador que Sarnaglia le transmitió a su confidente. Una bravata que también aceleró la decisión política de Perotti. Porque si el lunes Sarnaglia terminaba su licencia y quería volver a su puesto de jefe de Policía de la provincia, se quedaba sin ministro de Seguridad. Y una vez más volvió a respaldar a Sain.
“La decisión política es que Sarnaglia se vaya”. Ya no hay espacio para su vuelta. “No queremos que vuelva y si vuelve, no lo van a recibir”, fue uno de los comentarios que se escuchó en el Ministerio de Seguridad.
Sarnaglia anotició de que hoy debía declarar en Rosario ante los fiscales que investigan la red de juego clandestino al número dos de Sain, el secretario de Seguridad Germán Montenegro. Fue una reunión tensa, según una de las fuentes. Con “silencios”, según otra visión, porque “Sarnaglia no estaba bien de ánimo”. En los comentarios a su amigo, el “loco”, el jefe de Policía le confiesa: “Estoy podrido de esto. Ya he presentado la renuncia. La presenté varias veces”.
Si eso es cierto, Perotti ya tiene la decisión política de aceptarla. Y ratificarle la confianza a su ministro de Seguriad. “La relación entre el gobernador y Sain es excelente. El apoyo es absoluto. Hablan a diario”, mucho más desde que avanza la investigación de los fiscales de la Agencia de Criminalidad Organizada y Delitos Complejos de Rosario que destapó una red de juego clandestino con protección policial y judicial, dijo otra fuente.
El gobernador ya lo dijo. En Santa Fe, se terminó eso de mirar para otro lado: “Vamos a acompañar el avance de las investigaciones. Es un mensaje muy concreto de apoyo a todos aquellos que actúan bien y por derecha. Y en el esquema de aquel que se desvía, deben tener claro que no habrá ningún tipo de respaldo, ni vista gorda, ni complacencia alguna".