Los bares y restaurantes porteños, pese al día nublado y la baja temperatura imperante, comenzaron a atender con mesas al aire libre y una serie de protocolos, tras casi cinco meses en que los solo pudieron trabajar con delivery y la modalidad de productos para llevar, o "take away". De acuerdo con las disposiciones oficiales de la Ciudad, desde el lunes los locales gastronómicos pueden atender a sus clientes en terrazas y patios, además de en mesas ubicadas en veredas, en tanto se habilitó también el uso de los sanitarios de los establecimientos.
El jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel, aclaró que para ubicar mesas en la calle, los bares y restaurantes deben tramitar la autorización correspondiente si es que no contaban con ella antes de la cuarentena. El funcionario detalló, además, que todos los negocios deben contar con un trámite que "tiene que ver con la autorización del uso del espacio público".
"Algunos contaban (con el permiso) porque ya tenían mesas en la vereda, y en ese caso es más fácil. En el caso de aquellos que no tenían, tienen que hacer un trámite, presentar el plan, fotos del lugar", indicó Miguel en entrevista radial con un medio porteño.
La Secretaría de Atención Ciudadana y Gestión Comunal porteña informó que 231 locales gastronómicos iniciaron en las últimas 48 horas el trámite para habilitar mesas y sillas en veredas, patios y terrazas, en el marco del plan gradual de aperturas presentado hace 45 días por el Gobierno de la Ciudad.
Esos comercios se suman a los 1.800 que ya estaban autorizados a funcionar bajo esta modalidad antes de la pandemia y que en las primeras horas de la nueva etapa del distanciamiento social en la Ciudad pidieron la validación de los permisos, agregó la Secretaría.
A su vez, el ministro de Desarrollo Económico y Producción porteño, José Luis Giusti, aclaró que en bares y restaurantes está autorizada la utilización de los sanitarios, cumpliendo normas de higiene específicas y cuidando que no se produzcan aglomeraciones de gente en pasillos y demás lugares cerrados.
Giusti también dijo que los locales gastronómicos de la Ciudad podrán atender a clientes en terrazas armadas en las veredas y en patios, pero siempre observando los protocolos vigentes. "El comensal debe estar con el barbijo mientras no está comiendo ni bebiendo", explicó el funcionario, quien añadió que la disposición de los espacios debe respetar distancias y capacidades: "son cuatro personas por mesa a 1,5 metros entre sí y cada mesa a dos metros de distancia".
"Los cubiertos deben ser limpiados con una sustancia específica que está en el protocolo para no correr riesgos", subrayó Giusti, quien adelantó que "a partir de la semana que viene, en aquellas calles en donde sea posible, veremos de cortar un carril para habilitar mesas y sillas".