¡Viene Nanni Moretti! Esa es la dicha máxima que deparará la nueva edición del Bafici, que dará inicio el miércoles 19 de abril, finalizando el domino 30. Uno de los grandes héroes cinéfilos del actual director del evento, el crítico Javier Porta Fouz, la presencia en Buenos Aires del realizador de Caro Diario y la reciente Mia Madre será sin duda uno de los grandes acontecimientos en toda la historia del festival porteño, que este año cumple los 19. De hecho, la retrospectiva completa que le dedicará en esta edición el Bafici al cineasta romano da una vuelta carnero y le da la mano a la primera edición, la de 1999, cuando pudieron verse todas sus películas filmadas hasta ese momento. De acuerdo a lo anunciado en la conferencia de prensa celebrada en la mañana de ayer en instalaciones de la Usina del Arte, Moretti se hará presente en todas las exhibiciones de sus películas (¿será eso posible?), incluyendo una de Habemus Papam al aire libre, en Plaza Francia. Además se presentará un libro dedicado a su obra.
Además de la presencia del genial realizador de Palombella rosa, el Bafici –organizado, como de costumbre, por el Ministerio de Cultura de la Ciudad y con apoyo del Incaa– incluirá otras actividades. Cuatrocientas películas entre largos, medios y cortos, por ejemplo, como ya es tradicional. Más de cien estrenos mundiales y otro tanto para los latinoamericanos y sudamericanos. Treinta y dos sedes, si a las tradicionales (se sigue incluyendo al Gran Rivadavia de Floresta y, obviamente, sigue faltando la Lugones) se les suman los espacios culturales barriales que proyectarán cine gratuito (queda por ver cuál será la programación). Esos espacios son el Adán Buenosayres de Parque Chacabuco, el Homero Manzi de Pompeya, el Julio Cortázar de Núñez, el Julián Centeya de Boedo y cinco más en sendos barrios porteños. A ellos se les agregan barrios carenciados como el Rodrigo Bueno, Los Piletones, la Villa 21-24 y cuatro más, en una iniciativa que si se lleva adelante con coherencia puede ser valiosa. Habrá Cine al Aire Libre en Plaza Francia, el Anfiteatro de Parque Centenario, la Plaza Martín Fierro y Patio Salguero, y además el Bafici se sumará a la programación de la Usina del Arte durante la segunda quincena de abril.
Con presencia del Ministro de Cultura de la Ciudad, Ángel Jorge Pititto (aka Ángel Mahler), el Presidente del Incaa, Alejandro Cacetta, y el Director Artístico del Bafici, Javier Porta Foux, cupo a este último presentar la programación de esta edición Nº 19. La película de apertura será la germana Casting, que viene de ganar el premio Teddy (el destinado a la diversidad sexual) en la última edición de Berlín. El cierre quedará para el documental L’Opera de Paris, del suizo Jean-Stéphane Bron, a quien el Bafici le dedicó un foco tres años atrás. Entre una función y otra, el despliegue del festival, que en Competencia Internacional presentará más óperas primas que nunca: la mitad más una. Más cifras: siete películas latinoamericanas sobre un total de veinte a concurso, igual número de cineastas mujeres y cinco estrenos mundiales, lo cual representa un record para el festival. Las competidoras argentinas son El candidato, de Daniel Hendler (coproducción con Uruguay) y dos óperas primas: Hoy partido a las 3, de Clarisa Navas (sobre fútbol femenino) y Una aventura simple, de Ignacio Ceroi, que se anuncia como “una de aventuras”.
Seis óperas primas que habrá que descubrir, entre las quince a concurso en Competencia Argentina. Las que tienen antecedentes son Vergel, esperado opus 2 de Kris Niklison, realizadora de la magnífica Dilettante; Cícero impune, lo más nuevo de José Celestino Campusano, que desde hace unos años estrena indefectiblemente en Mar del Plata y el Bafici; Una ciudad de provincia, de otro “abonado” del festival porteño, Rodrigo Moreno (El custodio, Reimon); La vendedora de fósforos, lo siguiente de Alejo Moguillansky luego de El escarabajo de oro; El Pampero, de Matías Lucchesi, realizador de Ciencias naturales, que presenta la reaparición de Julio Chávez en un papel protagónico, y Otra madre, regreso del cordobés Mariano Luque luego de la premiada Salsipuedes. Este será el segundo año para la Competencia Latinoamericana, que presenta apenas nueve títulos, uno de ellos argentino (la cordobesa La película de Manuel) y otro argentino-paraguayo (Un suelo lejano).
Habrá focos dedicados al estadounidense Alex Ross Perry, el portugués António Reis, el alemán Heinz Emigholz y el francés Stéphane Brizé, todos ellos (salvo Reis, que ya no está en este mundo) con presencia de los realizadores. Perry, autor de la no estrenada Queen of Mars y la sí estrenada Analizando a Philip, es uno de los realizadores indie más consistentes del nuevo cine estadounidense. El de Reis puede ser todo un descubrimiento, teniendo en cuenta que se lo considera un realizador influyente sobre quienes lo sucedieron. Presentado en 2004, Emigholz vuelve al Bafici, con cuatro películas, estrenadas en la última Berlinale. Brizé, realizador de El precio de un hombre (2015), trae dos filmes, uno de ellos Une vie, muy bien recibido en la última edición de Venecia.
El precio de la entrada general es de $45 y $30 para estudiantes y jubilados. Las entradas se venderán en todas las sedes (con excepción de Fundación PROA, a partir del 20 de abril.
Las charlas en el Auditorio El Aleph y en el Microcine del Centro Cultural Recoleta y las proyecciones al aire libre son gratuitas y no requieren retiro de entradas. Son por orden de llegada y están sujetas a la capacidad de cada espacio. Para las proyecciones, charlas y eventos gratuitos en el resto de las sedes sí hay que retirar tickets. Se entregarán hasta dos entradas por persona. Para las clínicas profesionales en la Usina del Arte y el taller de Baficito en el Centro Cultural Recoleta, se requiere inscripción previa en www.buenosaires.gob.ar/festivales. El cupo es limitado. Las entradas anticipadas se podrán adquirir a partir del 10 de abril a través del sitio www.buenosaires.gob.ar/festivales o personalmente en el Village Recoleta, todos los días de 10 a 20 horas.