El Gobierno consiguió superar los umbrales de aceptación para activar las cláusulas de acción colectiva y evitar fondos buitres tras el canje. Las repercusiones por el éxito del canje de la deuda llegaron desde distintas partes del mundo. Por ejemplo el ex CEO de Pimco y actual economista de Allianz Mohamed El-Erian felicitó al equipo económico.

Entre las consultoras locales aseguraron que el acuerdo permite repensar la política económica para los próximos años liberando recursos para la inversión del Estado en el mercado interno (en lugar de desembolsos para pagos de deuda al exterior).

“El ahorro resultante asciende a 37 mil millones de dólares producto fundamentalmente de la reducción de intereses promedio de 7 a 3,07 por ciento”, indicó el centro CEPA.

Agregó que en los primeros años del acuerdo el Gobierno ahorra dólares y también pesos. “La reestructuración permite despejar vencimientos y con ello recuperar una senda de crecimiento. Si entre 2020 y 2024 vencían nada más y nada menos que 63.664 millones por todo concepto (capital e interés, deuda pública y privada, ley local y extranjera), se pagarán sólo 6116 millones aproximadamente”, indicó en un informe.

En el CEPA explicaron que de esta forma “el Gobierno permite liberar ingentes recursos fiscales para atender la pandemia y para recuperar el consumo y la producción, y con ello el crecimiento económico. En el presupuesto 2019 los intereses de deuda alcanzaron el 21 del total de gastos”, detalló el documento del centro de estudios.

“Se podría esperar un relajamiento de las tensiones cambiarias por un tiempo. A la par, se gana margen fiscal para financiar transferencias a sectores populares (ATP, IFE, Jubilaciones, entre otras)”, indicó el informe. Agregó que “el eventual acceso al crédito internacional en el mediano plazo podría abaratar la financiación de las empresas en un contexto de pandemia donde el apalancamiento es fundamental”.

Desde la Universidad de Avellaneda también destacaron el importante ahorro de recursos para el sector público en materia de deuda, lo cual permitirá reimpulsar políticas para incentivar le mercado interno. “En equivalencia a algunas variables que dan un orden de magnitud: la quita total conseguida por el Gobierno representa 250,9 millones de prestaciones IFE, 148,8 millones de jubilaciones mínimas, 762,1 millones de AUH y 19.307 hospitales modulares de emergencia”, indicó el documento de la UNDAV.

Se mencionó también que “la reestructuración de deuda externa alcanzada este año fue la más rápida de la historia argentina (9 meses desde el inicio de negociación en enero hasta la implementación del acuerdo en septiembre) y se encuentra por debajo del promedio de más de 180 reestructuraciones desde 1980”.

Con el acuerdo cerrado, según la UNDAV, el Estado nacional se ahorró 34.524 millones de dólares, lo que representa en partidas presupuestarias del año 2020: 10 de Educación y Cultura, 15 de Salud, 20 de Seguridad Interior, 20 de Transporte, 27 de Promoción y Asistencia Social, 66 de Ciencia y Técnica, 135 de Vivienda y Urbanismo, 269 de Agua Potable y Alcantarillado.

Se mencionó además que los intereses que el Tesoro no tendrá que desembolsar este año por haber renegociado la deuda externa, equivalen a 10 meses del programa de asistencia para la producción y el trabajo (ATP).

“La reestructuración mejoró varios indicadores económicos financieros. El riesgo país se encontraba en 3.987 puntos básicos, al 16 de abril, día de la presentación de la propuesta para renegociar con los tenedores de bonos”, planteó el documento.

Agregó que “luego del acuerdo cerrado con los bonistas, el riesgo país se ubicó, al 4 de agosto, en 2.027 puntos básicos (una reducción de 1960 puntos básicos). Con la concertación entre el Gobierno y los acreedores, el indicador registró un descenso del 49,2 por ciento”.