El Banco Central instrumentó ayer una reducción gradual de las comisiones que las emisoras de tarjetas de crédito y débito cobran a los comercios por la utilización del servicio. La reducción, que este año pasa de 3 a 2 por ciento para las tarjetas de crédito y del 1,5 al 1 por ciento para las de débito, corresponde al acuerdo que habían alcanzado algunas cámaras empresarias con el gobierno. En el Congreso continúa en debate una propuesta de la oposición para una nueva ley integral de tarjetas, que le otorgue mayor oxígeno a los comercios y limite los abusos de los bancos.
A mediados de mes, el presidente de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), Osvaldo Cornide, quien lideraba el proyecto en el Congreso para la elaboración de otra ley de tarjetas, acordó con el titular del Central, Federico Sturzenegger, y el ministro de Producción, Francisco Cabrera, un reducción escalonada de las comisiones, mientras aseguraba que continuaba el diálogo con diputados y senadores. En ese acuerdo, que distaba de la propuesta parlamentaria, se combino que en un plazo de tres años se aplicaría una reducción gradual que lleve del 3 al 1,8 por ciento las comisiones de las tarjetas de crédito y del 1,5 al 0,8 en débito en el mismo plazo.
La tasa de intercambio, el componente principal del arancel cobrado a los comercios por la aceptación de pagos con tarjeta, se ubica actualmente en el 3 por ciento sobre la transacción con crédito. De acuerdo con el nuevo esquema, ese costo se reducirá al 2 por ciento a partir del 1 de abril, al 1,85 por ciento en 2018, a 1,65 por ciento en 2019, a 1,5 por ciento en 2020 y desde el 2021 quedaría fijada en el 1,3 por ciento. Para el servicio de tarjetas de débito, los comercios hoy pagan hasta un tope del 1,5 por ciento. Este valor pasará al 1 por ciento en abril, a 0,90 por ciento en 2018, a 0,80 por ciento en 2019, a 0,70 por ciento en 2020 y se fijará en 0,60 por ciento desde 2021.
“El nuevo esquema dará lugar a una mayor competencia en esa industria y a que los comercios puedan cobrar con varias marcas de tarjeta simultáneamente”, justificó el organismo monetario. Pese a esta resolución, la medida puede ser reemplazada por una nueva Ley de Tarjetas de Crédito, como la que impulsa un sector de la oposición. En el Congreso, en diciembre se armó un revuelo luego de que la Cámara de Diputados no tratara un proyecto de baja de las comisiones que pagan los comerciantes sobre las ventas con tarjetas ya aprobado por Senadores y, en su lugar, enviara otro proyecto al Senado elaborado por el oficialismo.
El senador Alfredo Luenzo (Chubut somos todos) impulsa una iniciativa que incorpora consideraciones de dos proyectos previos, y que consiste en llevar las comisiones que pagan las pymes por las tarjetas de crédito del 3 al 1,5 por ciento este año y al 2 por ciento para las empresas grandes. A su vez, se reduciría de 1,5 a 0,5 por ciento para todas las operaciones que se realicen con tarjetas de débito. La reducción sería aún mayor para el caso de las zonas de frontera, donde los comercios podrían pagar, de acuerdo con el proyecto, una comisión del 1 por ciento sobre la transacción. Si bien la CAME apoya esta iniciativa, su acuerdo con el gobierno nacional colaboró ampliamente en que se mantengan cajoneadas las propuestas en el Congreso.