El fiscal general Maximiliano Hairabedián solicitó la declaración indagatoria de Eduardo Prestofelippo, conocido en redes sociales como "El Presto", por considerarlo responsable del delito de incitación a la violencia colectiva y por amenazas dirigidas a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
El requerimiento del fiscal, que subroga la Fiscalía Federal N° 3 de Córdoba, está basado en dos publicaciones realizadas en la red social Twitter en las que Prestofelippo habría alentado e incitado al odio y la violencia colectiva contra un determinado grupo de personas a causa de sus ideas políticas.
La denuncia surge tras la publicación de un mensaje el 1 de junio pasado en la que dice: "Con los líderes y los seguidores d la izquierda progre (sea d EE.UU o d Argentina, d Chile o d Francia, etc) no se debate, SE LOS ANIQUILA. Intentan arrebatarte tu LIBERTAD, tu PATRIA, tu FUTURO y tu DIGNIDAD como ser humano. Más de 100 años de historia mundial lo demuestran".
El fiscal también tomó en cuando un segundo tuit de Prestofelippo, el 27 de agosto pasado, que se viralizó y fue motivo de críticas. En ese mensaje amenazó a la vicepresidenta de la Nación: "Vos no vas a salir VIVA de este estallido social. Vas a ser la primera – junto con tus crías políticas – en pagar todo el daño que causaron. TE QUEDA POCO TIEMPO".
La amenaza ocurrió durante la sesión del Senado de este jueves, mientras la vicepresidenta, en su carácter de titular de la Cámara alta, encabezaba el debate del proyecto reforma judicial.
Según la resolución del fiscal general Hairabedián, de acreditarse la participación de Prestofelippo en los hechos, deberá responder en calidad de autor por el delito de "incitación a la violencia colectiva y aliento al odio de personas por sus ideas, en concurso ideal", con el agregado de amenazas en el segundo caso.
En su requerimiento, Hairabedián resaltó que es una acción que implica estímulo y sería "el imponer a hacer o no hacer algo aunque no se llegue a la determinación", lo que la diferencia de la instigación por no requerir una excitación directa. Se trata, entonces, de un "delito de peligro, que se consuma en forma instantánea".