Francia cerró este viernes 22 de las 62.000 escuelas reabiertas a comienzos de esta semana, cuando se reanudaron las clases presenciales, debido a que se reportaron contagios de coronavirus.
Diez de las escuelas cerradas están en la isla francesa de Reunión, en el Océano Índico, donde la atención médica es más deficiente que en Francia continental y el número de pacientes internados con coronavirus aumentó en las últimas semanas.
El ministro de Educación, Jean Blanquer, señaló a la radio Europe-1 que en total, las escuelas francesas reportaron unos 250 casos sospechosos diarios desde el martes, cuando comenzaron las clases presenciales. Si bien no todos los casos sospechosos resultan ser positivos, una vez que se informa una sospecha, las escuelas deben atenerse a un protocolo que puede incluir el regreso a sus hogares de toda una clase o el cierre de la escuela.
El ministro destacó que el número de cierres es bajo en relación al número de escuelas que abrieron en el país.
El gobierno de Francia, al igual que varios europeos, ordenó la reanudación presencial de las clases para hacer frente a las desigualdades empeoradas por las clases virtuales y para permitir que los padres de los alumnos puedan regresar a sus trabajos.
En pleno intento de vuelta a la normalidad, Francia reportó este jueves más de 7.000 nuevas infecciones, la tasa diaria más alta de Europa, con lo que el número total de infectados en el país se elevó 338.220, incluyendo 30.700 muertos.