La pandemia impactó negativamente en la recaudación nacional y terminó afectado a las provincias a través de la caída en las transferencias correspondientes a la coparticipación, aunque el gobierno nacional ha realizado esfuerzos para mitigar esa baja. La conclusión se extrae de un informe elaborado por el Centro de Economía Política Argentina (CEPA), que realizó un análisis y seguimiento de la evolución real de las transferencias.
Los ingresos provinciales provienen de dos fuentes: recursos propios (principalmente, Ingresos Brutos, Inmobiliario, Automotor y Sellos) y recursos de Coparticipación. Las transferencias por coparticipación tienen un peso relativo muy importante en el presupuesto provincial: en promedio, alcanzan el 71,3 por ciento del total, aunque hay algunas con mayor dependencia como Formosa y La Rioja, donde más del 90 por ciento de los ingresos son por coparticipación; y otras que menos, como en el caso de la Ciudad de Buenos Aires, que la coparticipación representa un 26,68 por ciento.
La recaudación por coparticipación cayó en términos reales 11,4 por ciento en marzo, 17,9 por ciento en abril y 25,8 por ciento en mayo. En junio y julio hubo una reducción de la caída de 11,6 y 14,1 por ciento, respectivametne. "Finalmente, agosto muestra un retorno a niveles previos a la pandemia, donde las transferencias en términos reales crecen 1,6 por ciento respecto al mismo mes del año anterior", destaca el informe. Al considerar la situación provincia por provincia, la pérdida en términos reales de las transferencias por coparticipación tiene en sus extremos en CABA, con una caída de 5,1 por ciento y Buenos Aires, que recupera 4,7 por ciento.
El CEPA observó que "en agosto las transferencias a las provincias le ganan a la evolución de la inflación pero caen en términos reales los recursos de las dos principales fuentes: IVA (de manera significativa) y ganancias (levemente). Esto se debe a un incremento sensible en las transferencias a las provincias vinculadas al Impuesto a los Bienes Personales cuyo vencimiento operó en el período".
Finalmente, el documento remarca las políticas que el gobierno nacional ha aplicado para mitigar el impacto negativo de la caída de la reaudación: el decreto 352/20 redestinó 60.000 millones de pesos para mejorar los aportes del Tesoro a las jurisdicciones provinciales y una suma equivalente para fortalecer el Fondo Fiduciario para el Desarrollo Provincial. Además hubo un sensible incremento en la partida Relaciones con Provincias y Desarrollo Regional y Asistencia a Gobiernos subnacionales, del Ministerio del interior, que pasa de 5.526 millones a 74.821 millones de pesos.
Entre las tres modificaciones presupuestarias el incremento ascendió a 179.295 millones de pesos adicionales y representa el 26 por ciento del total de la ampliación de las partidas presupuestarias.