Las redes sociales del Barcelona fueron un verdadero sinsentido durante los últimos días, mientras evitaban tocar el tema Messi. Efemérides, imágenes de los entrenamientos y las alegres presentaciones de refuerzos de poco renombre como el portugués Trincao o el juvenil español Pedri fueron las soluciones para "cambiar de tema". Sin embargo, todo ello se acabó este viernes cuando, tras el anuncio de continuidad del jugador, el apellido Messi dejó de ser una palabra prohibida.

Corazoncitos azules y rojos, una fotografía del capitán y una cita textual: "Voy a dar el máximo. Mi amor por el Barça no va a cambiar nunca". De esta manera, el Barcelona anunció de manera oficial que su máximo símbolo continuará en las filas del club, por al menos un año más.


Se espera que el futbolista vuelva a vestir la camiseta del Barcelona en el partido en el cual el elenco catalán recibirá al Villarreal por la tercera fecha de LaLiga, en el que será el debut del entrenador Ronald Koeman en el conjunto azulgrana.

El primer partido oficial del conjunto culé en la temporada será el fin de semana del 27 de septiembre en el Camp Nou debido a que el Barcelona pospuso los dos primeros encuentros del campeonato español por haber disputado la Champions League en agosto. De esta manera, Messi volvería a jugar para el Barcelona tras la dura derrota por 8-2 ante el Bayern Múnich, en los cuartos de final de la Champions que se disputó en la ciudad de Lisboa, en Portugal, caída que desencadenó la salida el entrenador Quique Setién.

Antes del comienzo de LaLiga, el Barcelona se enfrentará al Gimnástic de Tarragona en el Estadio Johan Cruyff, a puertas cerradas, el próximo sábado 12 de septiembre, pero Messi no estaría disponible para ese partido.


El argentino no se entrenó durante la primera semana de la era Koeman, por lo cual primero debe hacerse el test PCR para comprobar que no se contagió de coronavirus y luego ponerse bien físicamente.

En tanto, Messi podría seguir teniendo como compañero al delantero uruguayo Luis Suárez, quien estaba cerca de emigrar a la Juventus de Italia, pero el hecho de que su amigo continúe en el Barcelona podría llevarlo a cambiar de opinión y permanecer él también en el club catalán.

Según informaron este viernes los medios italianos Gazzetta Dello Sport e Il Corriere Della Sera, Messi podría torcer el destino de Suárez para que no se vaya a la Juventus, donde compartiría equipo con Cristiano Ronaldo.

El delantero empezó a buscar otro club luego de que Koeman le anunció que no iba a tenerlo en cuenta para la próxima temporada. El uruguayo culmina su contrato con la entidad de España en 2021, al igual que Messi, y en Italia aseguran que el jugador rosarino le habría pedido que siguiera un año más con él e irse libre en junio del año venidero.