Los tapabocas con válvulas se popularizaron recientemente en diferentes partes del mundo debido a su gran comodidad en el marco de las medidas preventivas para frenar la pandemia del coronavirus. Sin embargo, los especialistas desaconsejaron su uso generalizado porque este tipo de barbijo solamente protege de Covid-19 a quien lo usa y no al resto de las personas.
Se trata de un tapabocas que filtra las partículas del aire exterior cuando la persona inhala, pero permite el escape de partículas a través de la válvula cuando la persona exhala. De esta manera, si la persona que la usa está infectada puede expulsar pequeñas gotas con el virus al exhalar y así poner en riesgo a los demás.
Debido a que este tipo de barbijo comenzó a ser usado forma generalizada por la población, el vocero del Ministerio de Sanidad de España, Fernando Simón, los rebautizó como “egoístas”.
“El problema de la válvula es que el aire que exhala la persona que la lleva, lo concentra en un punto concreto. Eso puede hacer que alguien que esté expuesto a ese aire pueda infectarse. Pueden ser los tapabocas egoístas porque yo me protejo y los demás me preocupan poco”, señaló Simón.
Como la protección funciona en un solo sentido, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades en Estados Unidos (CDC), que meses atrás se adelantaron a la Organización Mundial de la Salud en recomendar el uso del barbijo, también se mostraron en contra de su uso. Asimismo, en diferentes partes del mundo se han prohibido para la población en general.
“La idea de incluir una válvula que se cierra cuando se inspira y se abre cuando se exhala es que sean más cómodas para el trabajador sanitario que las usa, ya que permite una mejor circulación de aire”, precisó Ben Killingley, experto en enfermedades infecciosas del Hospital del University College en Londres, Reino Unido.
En este sentido, agregó que al permitir la salida de aire, la válvula ayuda a regular la temperatura y evitar que la tela se humedezca. No obstante, aclaró que el personal hospitalario no puede utilizar este tipo de barbijos en ambientes que tienen que permanecer estériles, como una sala de operaciones, porque la válvula “permite que el aire exhalado no filtrado entre en el ambiente estéril”.
En tanto, un equipo de investigadores de la Universidad Atlántica de Florida (FAU) publicó recientemente un estudio en el que aseguran que las viseras de plástico y las máscaras con válvula no son suficientes para evitar la propagación de la Covid-19, por lo que desaconsejaron su uso generalizado.