Nicolás Caropresi, referente del Movimiento de Trabajadores Excluidos contó cómo fue la violenta irrupción de la policía de Lanús al comedor Cartoneritos, al que diariamente concurren a comer chicos de la zona. “Fue una represión brutal”, sintetizó y calificó como “una absoluta mentira” la versión de Diego Kravetz, secretario de Seguridad del municipio que conduce el macrista Néstor Grindetti.
Caropresi relató en diálogo con la AM 750 que la violencia policial se desató ante el pedido de que corrieran de lugar un operativo que estaban realizando en la zona, “a metros” del comedor. “Las compañeras vienen teniendo problemas con la policía hace tiempo con los integrantes del comedor”, explicó el dirigente social sobre el motivo de ese pedido porque “los hostigan todo el tiempo, sobre todo a los pibes de 13 ó 14 años”.
“La respuesta fue una brutal represión”, contó Caropresi, quien detalló que la policía ingresó al comedor “tirando gas pimienta y pegando palazos”. También precisó que “se llevaron detenidos a dos compañeros y por un par de horas no supimos cuál era su paradero” y que al mayor “le pegaron de manera cobarde, esposado dentro del auto”.
“Absolutamente mentira”, respondió Caropresi acerca de la versión oficial del municipio. “Es la excusa que encontró Diego Kravetz, que es el principal responsable de lo que ocurrió y que además estaba presente en el lugar de los hechos”, afirmó.
El testimonio de Caropresi no es el único que da cuenta del modo en que los policías de Grindetti ingresaron al comedor. María Saracho, la cocinera de Cartoneritos, también brindó detalles del violento accionar policial.