Desde Santa Fe

El gobierno de Omar Perotti cerró un acuerdo con estatales de UPCN y ATE, pero escala la tensión con los otros gremios del sector público. El ministro de Trabajo Roberto Sukerman fracasó en su intento de frenar el paro de 72 horas de los municipales que se inició ayer y finalizará mañana, dictó la “conciliación obligatoria”, pero Festram la impugnó, planteó un recurso para que la revoque y no levantó la huelga. Es más, interpretó la estrategia del ministro como un apriete político. “Un acto coercitivo contra el derecho de huelga y la negociación paritaria”. La primera audiencia está prevista para hoy a las 10, el líder de Festram, Claudio Leoni, anticipó a Rosario/12 que asistirá al encuentro y aclaró que al plan de lucha sólo lo puede suspender el plenario de secretarios generales que recién se reunirá mañana, en el tercer día de protesta. Al calendario de paros se sumarán hoy y mañana los profesionales de la salud de Siprus y los docentes de Amsafé que en la asamblea provincial de ayer resolvieron paro de 48 horas hoy y mañana y de 72 los días 15, 16 y 17. El reclamo en ambos casos es el mismo que el de Festram: la inmediata reapertura de las paritarias y la negociación libre.

Sukerman dictó la conciliación obligatoria horas antes de iniciarse el paro de ayer y llamó a la primera audiencia para hoy, a las 10. Es un plazo a la espera del resultado de las negociaciones entre los intendentes y el líder de Festram, que hasta el cierre, era incierto. “Hay un diálogo abierto”, dijo una fuente del Ministerio de Trabajo.

En tanto, Leoni confirmó que hoy, a las 10, asistirá a la audiencia que convocó Sukerman en su despacho. “¿Aceptan o rechazan la conciliación?”, se le preguntó. “Al presentar un recurso de revocatoria, la estamos rechazando. Lo que pedimos es seguir negociando en paritarias. Vamos a exponer las razones de la continuidad de las medidas de fuerza y la exigencia de una propuesta salarial seria”, contestó. Festram rechaza el bono de 3.000 pesos que ofrecieron los intendentes, reclama una actualización de las asignaciones familiares y denuncia la desprotección de los trabajadores municipales ante la pandemia porque las ART no cubren a los enfermos con covid 19.

El lunes, apenas Sukerman notificó el llamado a conciliación obligatoria, Leoni reunió a los delegados paritarios del gremio y coincidieron que lo del ministro era “un acto coercitivo contra el derecho de huelga y la negociación paritaria”. Acordaron presentar el recurso de revocatoria, asistir a la audiencia de hoy y convocar a un plenario de secretarios generales para mañana, jueves, que “analizará la situación y las acciones a seguir”.

“La decisión de Sukerman causó profunda indignación”, dijo Leoni. El de Festram era un paro anunciado hace semanas, y el ministro notificó al gremio poco antes de que arranque la medida, “en un horario que pone de manifiesto la violación de los protocolos de seguridad dispuestos por reglamentación provincial.

“El ministro quiere empujar” a Festram para que “violente la legislación” y “vulnere las facultades de sus cuerpos orgánicos”. “Esta acción -lejos de contribuir de buena fe al acercamiento de las partes- se constituyó en un instrumento de presión de las patronales, con el fin de menguar la adhesión a los reclamos sindicales”, alertó.

La estrategia de Sukerman coincide con el intento del gobierno de Omar Perotti de “imponer una política salarial” a los trabajadores públicos y socavar “el derecho a la negociación colectiva de los trabajadores municipales”, dijo Festram. Y pasó facturas. “La falta de integración de los comités mixtos”, la “desprotección de la vida y la salud de los trabajadores que hoy están sin cobertura de las ART frente el covid” y el desplome de las “asignaciones familiares” son cuentas pendientes del gobierno de Perotti. Por lo que la “intromisión” de Sukerman “goza de una parcialidad manifiesta e impune”, cuando muchas veces los intendentes “desconocieron la capacidad legal” del Ministerio de Trabajo para “actuar en conflictos de municipios y comunas”.

En tanto, ayer UPCN y ATE informaron que habían aceptado la oferta del gobierno de un aumento salarial por escala para estos cuatro meses que arranca con 4.000 pesos en agosto para las categorías más bajas y termina con 8.500 pesos en noviembre para las más altas. El ex secretario de Finanzas de la provincia, Pablo Olivares, que hoy es asesor del bloque de senadores de la UCR, puso en duda que se trate de un “acuerdo paritario”. “En la negociación colectiva se sobrentiende que si hay acuerdo es porque satisface los intereses de los trabajadores. Hay legalidad en representación. No fue sólo propuesta. En misma reunión se aceptó y firmó el acuerdo”, dijo.

Olivares explicó que “los costos del aumento en la masa salarial” de la Casa Gris son del 6,9 % en agosto, otro tanto en setiembre, 7,9% en octubre y 8,7% en noviembre. Casi 720 millones de pesos en cuatro meses, una quinta parte del superávit del primer semestre”

“La suma es no remunerativa y no bonificable. Pero se aclara que “forma parte de la remuneración mensual y habitual” de los trabajadores. “No se le retienen aportes para la Caja de Jubilaciones ni el IAPOS, pero si descuentos, embargos y cuota sindical”, explicó.