El jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, anunció que llevará a la Corte Suprema la decisión del Gobierno nacional de recuperar un punto de coparticipación, que el expresidente Macri le había otorgado a través de un decreto simple, a la Ciudad de Buenos Aires y de esa manera crear el Fondo de Fortalecimiento Financiero para la provincia de Buenos Aires. Rodeado por su gabinete y varios referentes de Juntos Por el Cambio, Rodríguez Larreta encabezó una conferencia de prensa en la que salió, prácticamente como el jefe de la oposición, a responder el anuncio que hizo el miércoles Alberto Fernández, luego del levantamiento de la Policía Bonaerense. "Lo que vivimos ayer es exactamente lo contrario al diálogo. Para lograr la seguridad en la provincia de Buenos Aires se eligió la división. Nos encontramos con una medida intempestiva, inconsulta, que le saca fondos de la coparticipación a la Ciudad de Buenos Aires para dárselos a la Provincia", disparó Larreta.
"Nos sacaron los fondos, de un día para el otro, en el medio de la pandemia", se quejó el jefe de Gobierno porteño, en un discurso en el que apostó a presentarse como el vocero del "diálogo y consenso" frente a la "especulación política" y la supuesta "arbitrariedad" del Gobierno nacional. De pie, acompañado por el vicejefe de gobierno Diego Santilli, los miembros de su gabinete y varios legisladores de Juntos Por el Cambio, como el senador Martín Lousteau, Rodríguez Larreta se mostró ofendido por la actitud presidencial y anunció que llevaría el reclamo a la Justicia. "Es inconstitucional", actuó Larreta la ofensa y dijo que "vamos a ir a la Corte Suprema a defender, con todos los recursos jurídicos que tengamos, la autonomía y los derechos de la Ciudad", aseguró.
"Toda mi vida elegí el camino del diálogo. Dejando de lado toda diferencia política me senté y trabajé codo a codo con el presidente y el gobernador. Acompañé al gobierno en todo el proceso de la negociación de la deuda. En la situación difícil que se presentó con la Policía de la Provincia de Buenos Aires, tuvimos una posición clarísima de apoyo a las instituciones", comenzó diciendo Larreta, anticipando la postura mesurada, victimizada pero tajante, que mantuvo a lo largo de toda la conferencia. En su discurso --que, por tiempos, revelaba sus ya conocidas aspiraciones presidenciales--, Larreta buscaba diferenciarse políticamente del gobierno nacional, remarcando su voluntad de diálogo frente a una supuesta actitud rupturista y "unilateral" del gobierno nacional: "Frente a decisiones arbitrarias como la de ayer, los argentinos estamos acostumbrados a responder con peleas, más agresiones, ese camino no nos llevó a ningún lado. No voy a contestar con la misma moneda, no voy a hacer una disputa personal, no voy a hacer un conflicto personal. No voy a cambiar mis convicciones por decisiones como estas, que considero erradas e inapropiadas", sostuvo Larreta, candidato ya a liderar Juntos Por el Cambio.
Refiriéndose específicamente al punto de coparticipación que el gobierno nacional le quitó a la Ciudad de Buenos Aires --excedente de lo que le había otorgado el ex presidente Mauricio Macri por decreto en el 2016--, el jefe de gobierno repitió lo que varios funcionarios de Juntos por el Cambio venían diciendo: "La Ciudad aporta mucho más de lo que recibe. Aporta el 22 por ciento del PBI y recibe el 3,5 de coparticipación. De cada 100 pesos que aporta, recibe 15", argumentó y destacó que la Constitución indicaba que, cuando se traspasan funciones (tal como ocurrió con la Policía Federal durante el gobierno de Macri), se lo debía hacer con recursos financieros. "La Constitución es clarísima en ese sentido. Estos fondos, cada peso, se invirtieron en construir una policía cercana a la gente, profesional, capacitada con mejor equipamiento, como ven en la calle. Para nosotros, es un orgullo", sostuvo y, ni lerdo ni perezoso, agradeció a los efectivos policiales.
El anuncio del redireccionamiento de fondos al territorio gobernado por Axel Kicillof, luego de las jornadas de protestas de la Bonaerense a lo largo de todo la provincia, fue un duro golpe a la Ciudad de Buenos Aires, que se calcula que perdería unos 35 mil millones de pesos anuales. "Había mucho enojo por la decisión unilateral y sin avisar que tomó el Presidente, pero también mucha sorpresa", comentó un funcionario porteño cercano a Larreta en diálogo con Página/12. "Obviamente estoy enojado. Ante una decisión improvisada, intempestiva, que atenta contra la unidad de los argentinos. ¿Cómo no me voy a enojar?", apuntó, a su vez, Larreta durante la conferencia, quien, entre otras cosas, contó que Alberto Fernández le había avisado sobre el recorte un minuto antes de que lo anunciara a todo el país el miércoles. "El Presidente me mandó un mensaje a las 19.29. La conferencia de prensa empezó a las 19.30. No lo contesté", aseguró.
Más allá del anuncio de Larreta, el camino de la Corte Suprema es el único que tiene porque los reclamos entre estados se resuelven justamente en la Corte. "Hasta que la Justicia se expida, vamos a tener que enfrentar esta quita de fondos y tomar algunas medidas excepcionales", advirtió Larreta, aunque aseguró que garantizaría los fondos para los servicios esenciales, como la Salud, la Educación y la Seguridad. Por último, el jefe comunal porteño, insistió en que, pese a todo, la Ciudad continuaría coordinando con la Nación y la Provincia la gestión de la pandemia.
Informe: María Cafferata