La japonesa Naomi Osaka alcanzó este jueves por segunda vez la final del Abierto de Estados Unidos al derrotar 7-6 (1), 3-6, 6-3 a la local Jennifer Brady. La rival de la ex número uno del mundo, cuarta cabeza de serie en el Abierto de este año, será la ganadora del partido que jugaban más tarde la estadounidense Serena Williams y la bielorrusa Victoria Azarenka.
Osaka, de 22 años, y la estadounidense Brady se enfrentaban por tercera vez. Antes se habían repartido los triunfos. Brady, vigésima octava preclasificada y actual número 41 del mundo, llevó el duelo hasta dos horas y ocho minutos. Osaka clavó nueve 'aces' y 35 golpes ganadores.
El primer set estuvo completamente igualado sin que ninguna de las dos tenistas cediese su saque, lo que hizo que se fuesen al 'tie-break', en el que Osaka siempre estuvo en control con dos roturas de punto que fueron los que la dejaron ganadora.
Nada cambió en el segundo, con la misma tónica de saque seguro e intercambios de golpes por parte de ambas tenistas, que no conseguían desequilibrar el marcador.
En el decisivo octavo juego Brady, de 25 años, consiguió el primer 'break' del partido tras superar un 30-0 favorable a Osaka, y se puso 5-3 arriba en el marcador, que sentenció con su saque.
A pesar de haber perdido el set, Osaka no se descontroló y comenzó el tercero y decisivo manteniendo el saque lo que hizo que le quitase el "momento" a Brady, que irónicamente fue la que perdió intensidad con su juego.
Eso hizo que Osaka en el cuarto juego lograse su primer 'break' del partido para ponerse con 3-1 a su favor y desde ahí, aunque tuvo también la oportunidad de haber hecho el 5-1 con el saque de Brady, la joven estadounidense resistió, pero al final Osaka con su saque sentenció la primera pelota de partido que tuvo.