Tras siete meses de gestión, César Oviedo, gerente del Hospital de Santa Victoria Este (SVE), municipio del departamento Rivadavia, fue alejado de este cargo por la ex ministra Josefina Medrano. El decreto que oficializó el cambio en la gerencia fue publicado en el Boletín Oficial de este jueves, pero tiene fecha del 7 de septiembre. La ex funcionaria dejó el Ministerio dos días después, al ser también alejada del cargo por decisión del gobernador Gustavo Sáenz.
Mientras que dentro del Hospital algunos consideraron que Oviedo debía irse, de otro lado lamentaban su partida y entendían que al poner a una persona que tiene una antigüedad de 5 años y está contratada como monotributista “nos terminaron de abandonar”. Sucede que en el mismo decreto se designó como gerente a Ariel Sosa, licenciado en nutrición.
En diálogo con Salta/12, Oviedo deslizó que la decisión de su alejamiento habría tenido que ver con “una negociación política con Antonio de los Ríos”, el ex secretario de Salud de Medrano. Y es que sostuvo que en los últimos tiempos habían tenido algunas discusiones “fuertes” debido a la diferencia de visiones sobre cómo afrontar la pandemia en este lugar, uno de los más vulnerables de Salta y Argentina.
Uno de los reclamos de Oviedo tenía que ver con la falta de hisopos para hacer los tests a quienes fueran contactos estrechos de casos positivos. Y el último pedido, que, según afirmó, tuvo respuestas por la presión que ejercieron los legisladores provinciales, fue la necesidad de que cada uno de los 13 Puestos de Salud que se reparten en SVE cuente con al menos dos tubos de oxígeno. La dificultad mayor, dijo, es la recarga, dado que deben ser llevados a Tartagal, ciudad cabecera del departamento San Martín y distante 163 kilómetros, y de allí, a General Güemes o a Salta Capital para ser recargados, a una distancia de más de 460 kilómetros. La demora es de unos 4 a 5 días.
“Al parecer, este reclamo molestó”, especuló el ex gerente, quien desde el lunes se encontraba con estudios médicos que concluyeron que había cursado un “infarto de arteria diagonal”. El miércoles “un amigo de Tartagal me comentó que me habían dejado fuera del Hospital”, pues nunca le informaron con antelación, contó. Indicó que se comunicó con el nombrado gerente actual, Sosa, quien le dijo que no sabía nada de su nueva designación.
Para Oviedo, su logro es que desde el 26 de marzo hasta que se fue “no se murió ningún niño o niña por desnutrición o deshidratado”. El 25 y 26 de marzo murieron dos hermanitos de un día para el otro por la desnutrición. El médico concluyó el diálogo afirmando, “literalmente, dejé el corazón en SVE”.
Cuatro muertos en 20 días
La Puntana, uno de los parajes de SVE, cuenta con 1.500 habitantes. Desde el 21 de agosto hasta el miércoles que pasó ya fallecieron cuatro de sus habitantes. En ese lapso, se informó de un total de 11 muertes en distintos parajes de Santa Victoria Este. Pero la cifra podría ser más alta.
Solamente en uno de los cuatro fallecimientos en La Puntana se confirmó como causada por la covid-19. Está entre los 3 casos de muertes confirmadas por la enfermedad en ese territorio. En La Puntana, además, fallecieron dos mujeres en sus domicilios con síntomas compatibles con la enfermedad. Y el miércoles último se conoció del deceso de un maestro bilingüe.
El cacique de la comunidad, Abel Santillán, indicó que en todos los casos se trató de personas que “venían enfermas”. Pero aseguró que al menos por la comunidad “ninguna gente de Salud vino a hacer el hisopado. No hay nadie. Solamente se mueven los enfermeros de La Puntana”. En la comunidad “hay un solo tubo de oxígeno”. Para Oviedo, cada puesto sanitario precisaría de al menos dos tubos. En principio, es la cantidad que se usa en un día para atender a una sola persona que presenta problemas para respirar.
“Me enteré que ya hay dos personas que están graves acá”, dijo Santillán al sostener que también sabe que hay otros adultos mayores de la comunidad que se están enfermando. Un problema que se agrega es que los familiares y los enfermos se niegan a ir al hospital, pues entienden que al llegar ahí “van a matarlos”. “Por lo menos, si se quedan en la casa alguien los atiende”, dijo el cacique.
En La Puntana, para tener agua deben esperar a que llegue la noche para llenar sus tachos de 200 litros y contar con el líquido necesario para el día siguiente.
Ayer la provincia informó que la Secretaría de Recursos Hídricos entregó 450 metros de tuberías de alta densidad, que servirán para abastecer "a más de 25 nuevas familias de la zona". El tendido de los caños estará a cargo de trabajadores municipales de Santa Victoria Este.
Hospitales de campaña
El miércoles en La Curvita, otro paraje de SVE, el ministro Martín de los Ríos mantuvo un encuentro con el intendente local Rojelio Nerón, su equipo de trabajo y los representantes de las comunidades de la zona, con el propósito de acordar los puntos estratégicos donde se instalarán los hospitales de campaña o centros de apoyo.
Las comunidades acordaron instalarlos en Misión La Paz, Santa María, La Puntana y en el paraje San Miguel.
Además de la función sanitaria en el marco de la emergencia por la pandemia, los hospitales de campaña funcionarán también como centros de organización de la atención primaria de salud, abastecimiento de agua y alimentos a la población y organización logística para asistir las emergencias.
Se prevé comenzar la instalación este fin de semana, a partir de un trabajo coordinado entre la Vº Brigada de Montaña y funcionarios de Producción y Desarrollo Sustentable, Salud, Desarrollo Social y Asuntos Indígenas, que conformaron una Unidad Interministerial para trabajar sobre las problemática del norte provincial.
“A partir de la instrucción del gobernador Gustavo Saénz, conformamos este equipo comprometido a acompañar a las comunidades en el tránsito de esta pandemia. Queremos llevarles tranquilidad, estaremos conteniéndolos y brindándoles la atención adecuada”, expresó De los Ríos.