Kate Winslet expresó su arrepentimiento por haber trabajado con los directores Roman Polanski (en Carnage, de 2011) y Woody Allen (en Wonder Man, 2017). Durante una entrevista con Vanity Fair, la actriz ganadora del Oscar se cuestionó: "¿Qué carajo estaba haciendo (al trabajar con ellos)?". La intérprete de 44 años también dijo que le parecía "increíble" que "esos hombres hayan sido tan vastamente apreciados en la industria cinematográfica durante tanto tiempo. Es una maldita desgracia".
Ya en 2018 Winslet había aludido a un "arrepentimiento" por haber trabajado con alguna gente, a la que no identificó. "Tengo que hacerme responsable por el hecho de que trabajé con ambos", dijo ahora. "No puedo volver el tiempo atrás. Estoy luchando con ese arrepentimiento pero, ¿qué nos queda si no somos capaces de ser malditamente honestos respecto a todo eso?".
Allen fue acusado de abusar de su hija adoptiva Dylan Farrow cuando ella tenía 7 años, en 1992, en casa de la que entonces era esposa del director, la actriz Mia Farrow. Allen ha negado categóricamente las acusaciones en repetidas oportunidades. Polanski fue condenado por violar a una chica de 13 años en 1977.
Winslet es la protagonista de la película romántica de época Ammonite, sobre la vida de la paleontóloga británica Mary Anning. El film, en el que también actúa Saoirse Ronan, se estrenará durante este año. "Esta película me ha abierto los ojos acerca de estar incluso más comprometida con honrar lo que las mujeres quieren que se diga por ellas en las películas y cómo realmente queremos ser retratadas, más allá de la orientación sexual", dijo la actriz de Titanic. "Porque la vida es jodidamente corta y quiero hacer lo mejor que pueda respectoa dejar un buen ejemplo para las mujeres más jóvenes. Ya les estamos dejando un mundo bastante hecho mierda, así que me gustaría hacer mi parte en cuanto a tener algo de integridad".
* The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.