El París Saint-Germain mostró este lunes su apoyo al delantero brasileño Neymar, que denunció que el defensor español del Olympique de Marsella Álvaro González le profirió insultos racistas en el clásico francés del domingo, que los parisinos perdieron por 1-0.
"El club subraya que no hay lugar para el racismo en la sociedad, el fútbol y nuestras vidas, y pide que todo el mundo se pronuncie contra todo tipo de racismo", indicó el múltiple campeón francés en un comunicado.
El PSG recalcó que durante más de 15 años colaboró con asociaciones como SOS Racisme, Licra y Sportitude en la lucha contra "todo tipo de discriminación", y confió en que la Liga de Fútbol Profesional (LFP) aclare lo sucedido.
"Ahora quiero ver la imagen del racista llamándome 'mono hijo de puta'... Yo fui expulsado ¿y él?", se quejó en su cuenta de Twitter Neymar, quien recibió una tarjeta roja después de que los responsables del VAR pidieran al árbitro del encuentro que revisara una imágenes en las que el ex jugador del Santos y el Barcelona cacheteaba repetidamente la cabeza de González.
Por su parte, el defensor central del Marsella negó haber tenido ese comportamiento racista: "No existe lugar para el racismo. Carrera limpia y con muchos compañeros y amigos en el día a día", sostuvo el español, junto a una fotografía con jugadores del Marsella de raza negra.
El encuentro, que supuso la primera victoria del OM sobre el PSG desde 2011, terminó con las expulsiones de Neymar, Kurzawa y el argentino Paredes por el equipo parisino y de Amavi y el también argentino Darío Benedetto por los marselleses.
La LFP se reunirá este miércoles para decidir las sanciones a esos cinco jugadores expulsados del partido y para determinar el número de encuentros que podrían ser suspendidos.