Israel firmó los llamados acuerdos de paz con Emiratos Árabes Unidos y Bahrein, en una ceremonia presentada como "histórica" por el presidente estadounidense, Donald Trump. De la firma de los llamados Acuerdos de Abraham en Washington participó el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, el ministro de Relaciones Exteriores de EAU, Abdulá bin Zayed, y el canciller de Bahrein, Abdulatif al Zayani.
Con la firma de estos pactos, Trump aspira a mostrarse como un hábil negociador a siete semanas de las elecciones en las que buscará un segundo mandato, pese a que las encuestas no lo acompañan. El mandatario estadounidense aseguró que "cinco o seís países más" alcanzarán acuerdos similares con el gobierno israelí. Mientras se firmaban los acuerdos, desde la Franja de Gaza partían al menos dos cohetes hacia Israel, en una jornada en la que además se registraron masivas protestas en Palestina, un territorio que se siente amenazado por el pacto diplomático.
"Estamos aquí esta tarde para cambiar el rumbo de la historia. Tras décadas de división y conflicto, marcamos el amanecer de un nuevo Medio Oriente", dijo Trump durante la ceremonia de firma de los promocionados acuerdos. Los pactos formalizan la decisión de Israel y Emiratos de establecer relaciones diplomáticas, anunciada el pasado 13 de agosto, y normalizan también los lazos entre el gobierno israelí y Bahrein, que revelaron su acuerdo el pasado viernes.
Trump declaró que en el futuro más países firmarán acuerdos con Israel. "Tenemos al menos cinco o seis países que se van a unir a nosotros muy pronto, ya estamos hablándoles", aseguró el mandatario sin nombrar a esas naciones. El presidente estadounidense quiere promocionar todo lo posible los acuerdos en plena campaña para las elecciones del tres de noviembre en Estados Unidos. "Hasta Bibi (apodo de Netanyahu) se cansa de la guerra", bromeó Trump, con el primer ministro israelí riéndose a su lado en el Despacho Oval.
Trump también aseguró que no tendría "ningún problema" en vender aviones de combate F-35 a Emiratos Árabes Unidos, un caza que desde hace tiempo Abu Dhabi quiere adquirir para convertirse en una potencia militar regional. A esa venta se opone Israel, el único país de la región que posee estos cazas estadounidenses, que presiona para mantener su abrumadora ventaja tecnológica frente. Por eso el anuncio de Trump causó molestia entre las autoridades israelíes.
"Día histórico"
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, aseguró que la "paz" con Emiratos y Bahrein "eventualmente se expandirá para incluir a otros Estados árabes y al final acabar con el conflicto árabe-israelí de una vez por todas". Netanyahu había manifestado antes de la firma que se trata de "un día histórico para Israel" y destacó que se trata de "una paz desde la fortaleza".
En Tel Aviv, la emblemática fachada de su alcaldía se iluminó con la palabra paz escrita en hebreo, árabe e inglés. A su vez, en las icónicas murallas de la Ciudad Vieja de Jerusalén se proyectaron las banderas de Emiratos y Bahrein junto a las de Israel y Estados Unidos. Pero las celebraciones quedaron eclipsadas por alarmas antiaéreas que sonaron en distintas comunidades lindantes con la Franja de Gaza. Al menos dos cohetes fueron lanzados desde la Franja a Israel. Ningún movimiento armado palestino reivindicó el ataque.
El ministro de Exteriores de Emiratos Árabes Unidos, Abdulá bin Zayed, se refirió también al conflicto entre Israel y los palestinos, que durante décadas enfrentó al gobierno israelí con sus vecinos árabes. "Este acuerdo nos permitirá seguir defendiendo al pueblo palestino y hacer realidad su esperanza de un Estado independiente dentro de una región estable y próspera", aseguró el ministro emiratí.
En tanto, el canciller de Bahrein, Abdulatif al Zayani, sostuvo que los Acuerdos de Abraham son "un paso histórico en el camino hacia una paz genuina y duradera" en Medio Oriente. Desde hace años, varios estados árabes petroleros cultivan lazos con autoridades israelíes, pero esta normalización de relaciones ofrece muchas oportunidades, especialmente económicas, a países que buscarán superar los daños causados por la pandemia.
"Acuerdos de la vergüenza"
Como era de esperar, la firma de acuerdos fue recibida con duras críticas en Palestina. "No habrá paz, seguridad o estabilidad para nadie en la región sin el fin de la ocupación y sin el respeto de los plenos derechos del pueblo palestino", aseguró el presidente Mahmud Abbas. Centenares de manifestantes protestaron el martes en la Cisjordania ocupada y en la Franja de Gaza contra los acuerdos que los palestinos consideran una traición a su causa. Los manifestantes ondearon banderas palestinas y en su mayoría usaron mascarillas para protegerse del coronavirus.
"Le decimos al régimen bareiní y a Emiratos que esta normalización es una traición total a la causa palestina y a las esperanzas de la nación árabe", dijo Ahmad al Medalal, un dirigente de la Yihad Islámica presente en las manifestaciones de Gaza. La firma de los acuerdos de normalización marcan "un día sombrío" en la historia del mundo árabe, declaró por su parte el primer ministro palestino, Mohamed Shtayé.