La duda asedia cuando hay que decidir sobre la publicación de un inédito póstumo. ¿Prevalece la calidad y el hecho de que puede proporcionar una perspectiva que enriquezca el análisis de la obra ya editada, o se impone el oportunismo de exprimirle el jugo hasta la última anotación en una servilleta? Hortensia Campanella, presidenta de la Fundación Mario Benedetti y notable biógrafa del escritor uruguayo, reveló que encontraron el manuscrito de una novela inconclusa de Benedetti, titulada Tampoco soy de aquí, justo en la jornada en la que se celebró el centenario del nacimiento del autor de Poemas de la oficina.
Campanella, autora de la biografía Mario Benedetti, un mito discretísimo, confirmó que examinarán las ochenta páginas descubiertas en el archivo donde se guardan varios documentos de Benedetti, como cartas y originales, una zona de la documentación en permanente proceso de revisión, estudio y análisis. El inesperado hallazgo se dio cuando varios periodistas le pidieron a la Fundación cartas que el autor de La vida ese paréntesis intercambió con otros escritores. Campanella anticipó que la novela inconclusa se situaría “al final de la línea novelística de Benedetti, después de Andamios”, publicada en 1996. Aunque los personajes son latinoamericanos y uruguayos, una parte la novela transcurre en España, país donde el escritor uruguayo vivió la última etapa de su exilio, que comenzó cuando llegó a Buenos Aires en 1973 y continuó, amenazas mediante de la Triple A, en Perú y Cuba.
En Tampoco soy de aquí Benedetti indaga acerca de los uruguayos que volvieron del exilio y cómo algunos terminaron regresando a España. A “las patrias interinas” --como las menciona en La casa y el ladrillo-- que fue fundando el escritor en su travesía de exiliado, se sumó un término que él mismo acuñó, “desexilio”, para referirse a su vuelta al Uruguay; regreso que se concretó en marzo de 1985 y que implicó la confrontación de lo imaginado con la realidad, el dilema entre irse y quedarse. “La acción está situada aparentemente a comienzos de los años 90, lo cual no quiere decir que haya sido escrita en esa época”, aclaró Roberto López Belloso, coordinador de la Fundación Benedetti, sobre la novela inconclusa encontrada, que tiene “múltiples correcciones a mano con su letra”, un material “indudable” del escritor uruguayo, que murió a los 88 años, el 17 de mayo de 2009, y que publicó siete novelas, entre las que se destacan La tregua, Gracias por el fuego y Primavera con una esquina rota.
La Fundación Mario Benedetti, creada a instancias del propio escritor en su testamento para preservar su obra, apoyar la literatura y fomentar los derechos humanos, analizará el manuscrito. “Él la dejó rotulada en una carpeta como ‘novela inédita inconclusa’, con lo cual estamos bastante seguros de que su voluntad es la publicación, y ahora estamos en proceso de estudio a fondo del material para saber cómo se va a dar a la imprenta”, explicó López Belloso. El coordinador de la Fundación plantea que lo más probable es que el texto se publique como está, “quizá con algún material anexo”. Aunque todavía no tienen precisiones sobre la publicación de Tampoco soy de aquí, López Belloso subrayó que “el interés por un texto de Mario es altísimo en todo el mundo”.
El ejemplo más paradigmático en cuanto a la publicación de inéditos lo constituye Franz Kafka; buena parte de su obra clave se conoció gracias a su amigo y albacea, Max Brod, que prefirió no quemar los manuscritos, contrariando el pedido del autor de La metamorfosis. La desobediencia no es un simulacro de rebeldía inocua. Dasacatar una orden puede ser la más eficaz de las estrategias para el futuro de la literatura. Desde los “papeles inesperados” de Julio Cortázar (además de su voluminosa y expansiva correspondencia), pasando por los once inéditos de Roberto Bolaño, hasta Tus pies toco en la sombra y otros poemas inéditos, de Pablo Neruda, encontrado en el archivo de la Fundación que lleva su nombre y publicado en 2014, los inéditos de toda estirpe son, casi siempre, un acontecimiento literario.