La Iniciativa por el Resguardo de los Derechos Humanos Covid-19 (IRDH) llamó esta mañana a una “acción urgente y solidaria para salvar vidas” en el marco del avance que, sin prisa pero sin pausa, está experimentando el país en términos de expansión de la pandemia de coronavirus. En ese sentido, sus referentes --integrantes de organismos de derechos humanos, investigadores y científicos, trabajadores y trabajadoras de la salud, representantes gremiales, entre otros-- propusieron a los gobiernos locales “acompañar la política sanitaria nacional”, y al Gobierno nacional “comunicar la gravedad de la situación” así como reemplazar el aislamiento social, preventivo y obligatorio por una modalidad selectiva e intermitente de cierre y apertura de actividades en diferentes partes del territorio nacional. El objetivo es “evitar las muertes que son evitables”, puntualizaron en una conferencia de prensa que ofrecieron este mediodía. La propuesta la enviaron, detallada, al Presidente Alberto Fernández en una carta.
“Los muertos no se ven porque los medios masivos los invisibilizan, pero son personas, no números. Y las familias lloran en soledad. Estamos ante una catástrofe”, apuntó Mabel Careaga, refernte de la agrupación de derechos Humanos Familiares y Amigos de los 12 de la Santa Cruz e impulsora de la IRDH que se propuso analizar y concientizar sobre la situación de los derechos humanos en tiempos de pandemia y aislamiento, así como proponer y consensuar ideas que permitan defender esos derechos. El de la vida y el de la salud, principalmente.
Luego de la primera conferencia de prensa que ofrecieron el mes pasado para advertir sobre el peligro de las intenciones aperturistas de diferentes dirigentes gubernamentales ante el avence del Coronavirus, volvieron a insistir. “La situación es peor ahora”, postuló la Madre de Plaza de Mayo de la Linea Fundadora Taty Almeida durante la apertura de la conferencia del IRDH que apuntó especialmente sobre la situación de siete provincias, Jujuy, Salta, Córdoba, Mendoza, Santa Fe, Buenos Aires, Rio Negro y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, para donde el colectivo de colectivos llamó a una “Acción urgente y solidaria para salvar vidas”. A lo largo de la conferencia de prensa expusieron representantes del sector de asistencia sanitaria, investigación científica y derechos humanos de esas provincias que desplegaron detalles de la situación que atraviesan.
“Es lamentable cómo en esas siete provincias no cuidan a sus ciudadanos. Y pensar que la mayoría de esos territorios los han votado”, consideró Almeida, con especial énfasis en Jujuy, Ciudad de Buenos Aires y Salta. Enfatizó: “No les pedimos, les exigimos, que cuiden a la gente, que prioricen la vida, que eviten las muertes evitables”. Su compañera de lucha y pañuelo blanco, Vera Jarach, señaló que “la acción más importante que se puede desarrollar es la solidaridad, y una reacción vinculada debe ser similar a la entrega heroica de enfermeros y médicos que se exponen para curar, asistir y acompañar las soledades de las muertes”.
Muertes evitables
El biólogo e investigador de Conicet, Alberto Kornblihtt, también formó parte de la inauguración de la conferencia. Allí, contó que uno de los consensos fuertes que amalgaman el colectivo de investigadores y científicos de diversos campos que se conformó para analizar los efectos de la pandemia en Argentina tiene que ver con la calificación de “grave” a la situación que vive el país vinculada con la cantidad de muertos por el virus, que se acumulan día a día. “Seguimos viendo que el número de muertos crece, es un número que no se puede ocultar, que no depende de una actividad humana como el testeo, y que es evitable”, describió.
Aclaró que desde mayo, “cuando se terminó la cuarentena en serio que vivió el país”, observaron un “crecimiento exponencial del número de muertos mes a mes”. “No podemos naturalizar las muertes, menos las evitables”, concluyó y sumó como consejo al Gobierno nacional “dar un buen mensaje”.
Una propuesta al Presidente
La “acción urgente y solidaria” que propone la IRDH tiene tres destinatarios: los ciudadanos, los gobiernos provinciales y municipales y el nacional. En una carta enviada al primer mandatario, enumeraron en primer lugar el pedido a los y las ciudadanas de “tomar conciencia y realizar una urgente y solidaria retracción de movilidad” a la vez que le solicitaron al Gobierno nacional que “transmita la gravedad de la actual situación”. Los gobiernos locales, por su parte, deberán “acompañar la política sanitaria nacional, haciendo cumplir estrictamente los protocolos de las actividades autorizadas y cesar en su reclamo en medios masivos de comunicación por libertades que nunca perdimos”
Por último, insistieron en la aplicación de “herramientas novedosas” para evitar la propagación del virus, pero sobre todo, el incremento de muertes. “Proponemos ofrecer mensajes de predictibilidad y planificación, que permita a nuestra sociedad organizarse y comprometerse activamente en un plan de acción conjunto con el Estado”.
El especialista Rodrigo Castro explicó brevemente durante la conferencia de qué tratan los aislamientos selectivos, preventivos e intermitentes. “Se aplicarían de manera planificada, a partir del diseño de un calendario, y se combinarían momentos de restricción de movilidad con períodos de reactivación económica”, explicó. Y remarcó que serían “lo opuesto a lo que se fue haciendo hasta ahora, de tomar decisiones en base a lo que va pasando. Si actuamos así, el virus ya nos ganó”. Según detalló Castro, si se hubiera aplicado esta estrategia desde mayo, “hoy habría menos de mil muertos y tendríamos menos de 100 contagios por día”, evaluó.