El danés Soren Kragh Andersen conquistó este viernes la decimonovena y antepenúltima etapa del Tour de Francia, segunda que festeja el pedalista de Sunweb en esta centésimo séptima edición de la competencia, que sigue teniendo como líder al esloveno Primoz Roglic, cada vez más cerca de quedarse con el triunfo en la clasificación general..
Andersen, que también había celebrado en Lyon, impuso el ritmo en el tramo de 166,5 kilómetros que unió Bourg-en-Bresse con Champagnole, con un tiempo de tres horas, 36 minutos y 33 segundos. El danés le sacó 53 segundos de ventaja al esloveno Luca Mezgec y al belga Jasper Stuyven, quienes completaron el podio de la jornada.
A 7'38" del ganador del día y dentro de un numeroso pelotón completó la etapa Roglic, que cumplió su objetivo y mantuvo la diferencia en la general sobre su compatriota Tadej Pogacar, que se ubica a 57 segundos, y sobre el colombiano Miguel Angel López, que se encuentra a 1'27" del puntero.
El líder de la competencia intentará sellar la victoria el sábado, cuando se dispute la prueba contrarreloj que resultará decisiva y se correrá sobre 36,2 kilómetros de recorrido entre Luer y La Plance des Belles Filles. La etapa del domingo es simbólica, ya que los ciclistas llegan a los Campos Elíseos en una exhibición que no modifica las posiciones de la prueba.
Roglic compite con el equipo Jumbo-Visma, cuyo director deportivo Meriijn Zeeman fue expulsado de la prueba tras ser acusado de "agresión, intimidación, insultos y amenazas" contra un miembro de la Unión Ciclista Internacional en la etapa previa.
Zeeman, multado con 2.000 francos suizos, se defendió aduciendo que se molestó con un comisario de la competencia que "quiso desmontar el soporte de la bicicleta de Primoz y terminó danándola". "Debí haber mantenido la calma y acercarme respetuosamente al comisario. Lamento no haberlo hecho, aunque sí me disculpé luego con él y las aceptó", comentó el sancionado que dijo sentirse "devastado, pero feliz porque el sueño sigue vivo".
