El piloto argentino José María "Pechito" López, junto al británico Mike Conway y el japonés Kamui Kobayashi, volvió a quedarse a las puertas del triunfo en las tradicionales 24 Horas de Le Mans, pese a partir desde la "pole position" y liderar la primera mitad de la prueba. Un problema técnico en el Toyota TS050 Hybrid cuando conducía Kobayashi le hizo perder casi media hora en los boxes, por lo que el trinomio se tuvo que conformar con el tercer puesto del podio.
Cuando faltaban 11 horas y 48 minutos para la bandera a cuadros en el autódromo de La Sarthe, el auto #7 de la escudería Toyota Gazoo Racing debió ingresar a boxes para reparar el turbocompresor y esa asistencia, que duró 29 minutos, lo marginó del primer al cuarto lugar del clasificador.
El argentino retomó el manejo de la unidad después de la parada y logró recuperar una posición, pero no pudo evitar que la victoria se la llevara el otro coche de su escudería (el número #8), piloteado por el francés Sebastien Buemi, el japonés Kazuki Nakajima y el neozelandés Brendon Hartley.
En el segundo lugar del podio quedó el otro integrante del tercer con mayor favoritismo en la competencia: el auto Rebellion (#1), a cargo del francés Norman Nato, el estadounidense Gustavo Menezes y el brasileño Bruno Senna, sobrino de Ayrton, leyenda de la Fórmula 1.
Al momento de registrar la falla en su motor, el Toyota TS050 Hybrid de "Pechito" López contaba con más de una vuelta de ventaja sobre el otro coche del equipo japonés, que era su inmediato perseguidor.
López manejó buena parte de la noche francesa con un notable rendimiento y, al entregarle la butaca a Conmay, se mostró satisfecho: “Mi período estuvo bien y quedo feliz con eso. Me sentí lo suficientemente cómodo en general y el coche está funcionando bien”.
“La situación parece estar bien para nosotros en este momento y tenemos una ventaja decente. No correremos ningún riesgo porque sabemos que cualquier cosa puede pasar”, dijo antes del incidente mecánico.
El equipo del cordobés quedó a las puertas de la victoria por segundo año consecutivo ya que en la edición 2019 perdió el liderazgo de la carrera por una pinchadura cuando faltaba una hora para el final. Así, "Pechito" López se subió por tercera vez al podio de Las 24 Horas de Le Mans en cuatro participaciones. En la primera de 2017 no se clasificó y en 2018 había finalizado segundo.
La competencia francesa forma parte del Mundial de Resistencia de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), que culminará el próximo 8 de noviembre con las 8 Horas de Bahréin.
"Desafortunadamente para nosotros no terminó como queríamos. De mi parte lo único que puedo hacer es ver lo positivo, ver el trabajo que hicimos como pilotos. Mike y Kamui hicieron un trabajo fantástico, yo hice mi parte", declaró el cordobés después de la carrera, en conferencia de prensa. "Hay cosas que no podés manejar, son cosas que pasan y no hay arrepentimientos. Por supuesto es decepcionante decir que por segundo año fuimos el auto más rápido y no poder ganar es frustrante", asimiló sobre el desperfecto mecánico del auto.
Finalmente, el cordobés felicitó a sus compañeros de escudería, que se impusieron en Le Mans con el auto número 8. "Hay que felicitar a todo el equipo, es un gran logro para Toyota ganar esta gran carrera por tercera vez. Todos hicieron un trabajo fantástico", concluyó.