En medio del caso Falabella, que disparó versiones de éxodo empresario, buena parte del empresariado nacional salió a marcar una diferencia sobre la visión del contexto económico y político local. Y explicó por qué decidió invertir en el país. “el que se quiere ir ahora no se va por el contexto local”.
Hace unos días, la firma de grifería Hidromet anunció junto al Presidente de la Nación inversiones por 1,5 millones de dólares para adquisición de maquinaria para aumentar la producción. Luis Schamun, su presidente, habló con Página I12 y dio su visión de la situación de las empresas en el país.
“Nos estamos recomponiendo de un industricidio que sufrimos en la etapa anterior. El Gobierno de Macri fue un golpe de knock out para las empresas”, expresó el dirigente pyme. Y siguió con la metáfora boxística para graficar de dónde vienen los problemas económicos que padece el sector privado. “Fue como a ese boxeador que lo noquean en el cuarto round y sigue toda la pelea golpeado”.
Contó Schamun que “yo debería haber cerrado mi planta de San Luis durante el gobierno de Macri. Pero fui hasta la planta con el gerente, vi a la gente, a los trabajadores, y me volví a Buenos Aires con la idea de que tenía que pelear y mantenerme. Y le busqué la vuelta. Fue un desastre el Gobierno anterior”.
Consultado respecto a por qué invirtió y por qué cree que hay firmas que manifiestan que quieren dejar el país, apuntó que “invertimos porque hay un proceso de fuerte sustitución de importaciones, que va a hacer que haya más puestos de trabajo aún con la economía como está hoy”.
Respecto a la decisión oficial de endurecer el cepo que puso Macri para cuidar las reservas del Banco Central (BCRA), afirmó que “este no es un país que hoy pueda darse el lujo de abrir sus puertas como si nada, como si la economía estuviera normalizada. Hasta Trump cuida hoy el trabajo de sus empresarios”.
Agregó que “no he escuchado a ningún economista de los que critican el cepo que explique que lo que necesita Argentina es un plan de exportaciones como única solución para tener dólares genuinos”.
“Los sectores nacionales que invirtieron, los empresarios nacionales, van a estar beneficiados en este proceso”, consideró Schamun. “Venimos de un proceso en el que muchas empresas aprovecharon el poco cariño que había hacia el trabajo y despidieron personal para empezar a importar lo mismo que antes producían”.