Rosario ya está en el peor de los escenarios de la pandemia. No solo por los 683 casos nuevos de covid 19 que se reportaron ayer y mantienen en alto la velocidad de contagio, sino porque ahora solo quedan 27 camas disponibles en la ciudad para internar pacientes críticos; la capacidad de los efectores municipales se ocupó por completo y en los hospitales provinciales solo queda 4% de las plazas. En las estimaciones oficiales asumen que el sistema público y privado tiene resto para atender una semana más a este ritmo de contagios, y después de eso, nadie quiere aventurar cómo será la suerte de quienes se enfermen en adelante. "Se vienen unas siete semanas bravísimas", comentaron ayer autoridades sanitarias con resignación y cansancio.
En los despachos donde se coordinan las acciones de los sistemas provincial, municipales y privado de salud ayer los gestos eran de una preocupación cada vez más cercana a la desesperación. Contaron que por estas horas la ocupación de camas en el sistema municipal de Rosario llegó al 100%, y que en los hospitales provinciales ese indicador es 96%. Algo peor que el lunes. Por lo tanto, ahora flujo de pacientes se reorienta y se apoya en los sanatorios y clínicas privadas, donde el margen de vacancia todavía es algo menos crítico, 82 por ciento.
Ayer la cartera sanitaria informó el deceso de 8 pacientes que estaban internados, cinco de los cuales residían en Rosario. Las otras personas eran de Alcorta, Rafaela y Villa Gobernador Gálvez. Todas tenían co morbilidades y edad avanzada, menos un hombre de 37 años. Ahora la cuenta global es de 298 víctimas fatales en Santa Fe desde que comenzó la pandemia.
A nivel provincial se detectaron 1586 casos nuevos de coronavirus, lo que marcó un récord en cantidad de positivos para una sola jornada en la provincia. De esos, 683 corresponden a Rosario, 146 a Santa Fe ciudad, y 73 en Villa Gobernador Gálvez, por citar a los principales.
Algunos hospitales se llenaron de pacientes en las últimas horas, por covid y por otras dolencias. Aunque ya desde la última semana la proporción de pacientes covid internados es del 43% sobre el total. El Hospital de Emergencias Clemente Álvarez tenía todas sus camas ocupadas anoche, tanto de terapia intensiva como de sala general. Lo mismo ocurría en el Policlínico Eva Perón, de Granadero Baigorria, y en el hospital modular lindero que se erigió este año.
El conteo que llegó a última hora al gobierno marcó en rojo una cifra de alarma: entre las 9 camas para pacientes críticos del sector público y las 18 que dispone todavía el sector privado, en toda Rosario queda lugar hoy para internar hasta 27 pacientes en terapia intensiva, y 84 en sala general. La proyección es desoladora: si se tiene que en Santa Fe un 2,5% de los contagios termina requiriendo cuidados intensivos, es de suponer que un par de días más donde haya más de 600 casos nuevos acabará con el margen que aún conserva el sistema. Hasta anoche, había 161 pacientes en terapia intensiva.
En el medio, surgieron previsibles recelos entre los equipos de provincia y los del municipio rosarino. Desde el ministerio solicitaban al secretario de Salud, Leonardo Caruana, que asigne entre 10 a 20 camas en el Heca durante tres semanas para atender pacientes covid, algo que es resistido desde la estructura del hospital de emergencias. Por otra parte, la difusión de los testeos que hizo provincia al personal médico no cayó bien en el orden municipal: "Hace rato que aquí venimos haciendo eso y no hacemos bombo", desdeñó una fuente.
Para descomprimir la demanda a la línea 08000, la provincia habilitó ayer la posibilidad de consultar el diagnóstico de los hisopados en internet: https://www.santafe.gov.ar/hisopado.
En tanto, el paro de trabajadores municipales disminuyó la capacidad de respuesta del sistema, aunque se mantuvieron las guardias en todo lo que incumbe a la atención covid en los efectores de salud rosarinos. Sí, en cambio, están suspendidos los turnos programados para cualquier intervención o asistencia.
Hoy regresan a Santa Fe los primeros 17 enfermeros que vinieron como refuerzo el fin de semana, y arriban otros tantos, para trabajar donde haga falta, como aquellos lo hicieron en el Hospital Provincial en estos días. Luego vendrá un contingente de 10 médicos también de la capital provincial, y se espera que Nación envíe también otro grupo de enfermeros para el Eva Perón, donde la UTI está saturada con pacientes no covid. "El recurso humano es el gran limitante", dijo el director de Salud de Tercer Nivel, Rodrigo Mediavilla. Por eso razón, se decidió reasignar profesionales para ayudar a los terapistas, hoy la especialidad más jaqueada por la demanda de la pandemia. Esos son cirujanos generales, anestesistas y médicos clínicos, entre otros. A las 13 camas críticas que se sumaron el lunes en el Hospital Provincial, hoy se agregarán otras 6, y 7 más en el de Baigorria.