La pulseada por el regreso a las clases presenciales de los chicos más vulnerables se extendió al conurbano. Mientras el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta terminaba este miércoles de ultimar los detalles --en una reunión entre sus equipos técnicos y los de Nación-- del protocolo que presentará el jueves de manera formal al Ministerio de Educación nacional, municipios liderados por intendentes de Juntos por el Cambio enviaron a la gobernación provincial protocolos similares al porteño, que pretenden el regreso de alumnos del último año a patios internos de las escuelas. Uno de ellos es Tres de Febero, donde el jefe comunal, Diego Valenzuela, expuso a una "prueba piloto" a chicos, sin autorización. Los repudios de la comunidad educativa a la presencialidad sin suficientes cuidados ya no parten solo de sindicatos docentes y de estudiantes. Este miércoles enviaron al gobierno porteño una carta supervisores de todas las modalidades y áreas de educación de la ciudad, y se sumaron 20 centros de estudiantes de escuelas secundarias.
La reunión de los equipos técnicos
El protocolo que presentará Ciudad a Nación, según informaron a este diario fuentes del gobierno porteño, insistirá con la vuelta a los patios de las escuelas. Esta vez lo proponen a partir del 5 de octubre, en 381 establecimientos educativos. El gobierno de Larreta insistirá en que los turnos sean de dos horas, con un máximo de diez personas, y que en caso de no poder asistir por cuestiones de transporte se deberá coordinar la asistencia de los estudiantes a un establecimiento educativo de cercanía.
Fuentes del Ministerio de Educación nacional expresaron a Página/12 que en la reunión de este miércoles no se llegó a un acuerdo para la vuelta a clases, que hubo algunas modificaciones al protocolo, pero que fundamentalmente se avanzó en la construcción de "indicadores epidemiológicos" que permitirán "tener un índice objetivo para despolitizar la situación" y que harán factible "poner los números a consideración del Consejo Federal de Educación para ser equitativos y federales en las desiciones que se tomen".
La situación en el conurbano
Desde la Gobernación bonaerense aseguraron, en diálogo con Página/12, que Tres de Febrero y San Miguel ya presentaron sus protocolos. Aún no fueron analizados, pero advierten que "la normativa que establece el Ministerio de Educación de la Nación es clara y cualquier iniciativa deberá cumplir con esos principios". Desde La Plata, ciudad también gobernada por JxC, anunciaron que enviarían una propuesta que consistiría en llevar a alumnos que no tienen acceso a internet "a estudiar a la República de los Niños".
Antes de tener respuesta de la gobernación, el intendente de Tres de Febrero realizó una "prueba piloto" en la que se sacó fotos difundidas en algunos medios de comunicación. Se lo veía frente de un grupo de alumnos sentados en bancos de escuela, chicos de sexto año del Instituto Niño Jesús de Santos Lugares. La Junta Regional de Educación Católica de la Diócesis de San Martín explicó en un comunicado que dicho colegio "recibió a algunos alumnos de sexto año que querían dialogar sobre una problemática, lo cual no significó un hecho áulico". Algunos padres, en cambio, publicaron en sus redes que "las familias no estábamos enteradas de ningún protocolo. Hicieron algo ilegal utilizando a nuestros hijos, por algo les hicieron llevar los uniformes en la mochila y solicitaron no caminar en la calle con ellos".
Desde la gobernación bonaerense indicaron a Página/12 que, si bien aún no tienen "una mirada integral de los protocolos presentados", están de acuerdo "en la necesidad de avanzar en un progresivo regreso a la presencialidad por lo que implica a lo afectivo, psicológico y educativo. Pero tenemos que hacerlo a la velocidad que la situación epidemiológica lo permita". "Hay que ser muy responsables porque precipitarnos podría tener serias consecuencias sanitarias, pero también disrupciones en la continuidad pedagógica", explicaron.
En la carta que este miércoles enviaron supervisores al jefe de gobierno Horacio Rodríguez Larreta, y a los ministros Acuña y Quirós, explicaron que "la política educativa de un país trasciende a una coyuntura temporal". Advirtieron que el "protocolo presentado no constituye una propuesta pedagógica, no fue consultada ni construida con el cuerpo de supervisores, y presenta un sinnúmero de puntos objetables, que dan cuenta de la forma unilateral en la que fue diseñada". Subrayaron que "las propuestas insisten con una revinculación presencial de los alumnos más postergados y desconocen el riesgo que implica", y cuestionaron que la Ciudad "quiera nombrar personal por fuera del estatuto docente".
Informe: Melisa Molina