El genocida Miguel Osvaldo Etchecolatz sigue cosechando rechazos al último pedido que su defensa presentó para continuar cumpliendo en su casa del Bosque Peralta Ramos, en Mar del Plata, sus múltiples condenas por delitos de lesa humanidad. Esta nueva solicitud que llega a los tribunales de La Plata, la cuarta desde que comenzó la pandemia de coronavirus, generó revuelo debido a que viene con la habilitación lograda en Comodoro Py. Sin embargo, querellas y Fiscalía sostuvieron que no hay elementos nuevos que ameriten beneficiar al represor con el abandono de la cárcel de Ezeiza, donde hasta el momento permanece encerrado. Falta que se expida el tribunal oral de La Plata.
Luego de que el Tribunal Oral federal número 6 de Capital Federal otorgara el arresto domiciliario al ex jefe de Investigaciones de la Policía Bonaerense durante la dictadura, su defensor fue directo a los tribunales de La Plata y en el expediente sobre los crímenes del llamado Circuito Camps --la red de centros clandestinos que comandó Ramón Camps y que secundó Etchecolatz-- con la “buena” nueva.
Las partes que representan al Estado, a les sobrevivientes y a les familiares de las víctimas no cambiaron su postura respecto de los otros tres pedidos de arresto domiciliario que pidió el represor durante la pandemia --marzo, abril y junio--. Nada nuevo.
Desde la Unidad Fiscal Federal de La Plata solicitaron al TOF 1 de esa jurisdicción que rechace el beneficio bajo el argumento de que "las circunstancias aludidas por el defensor oficial Gastón Ezequiel Barreiro y el informe elaborado por la médica María Alejandra Preisisch no pueden considerarse hechos nuevos ni tienen entidad suficiente para modificar la situación procesal" de Etchecolatz.
Según difundió la Procuración General, los fiscales Hernán Schapiro y Gonzalo Miranda, junto a sus auxiliares Juan Martín Nogueira y Ana Oberlin, apuntaron en una nota dirigida al TOF 1 de La Plata que la situación descripta respecto al estado de Etchecolatz “no ha variado, en lo sustancial, de los exámenes médicos anteriores" y agregaron que "las patologías reseñadas, en general de larga data, y el estado de salud no presentan diferencias con relación al último informe de febrero de este año".
Por su parte, la querella que encabeza la Liga Argentina por los Derechos Humanos solicitó el rechazo del beneficio al considerar que “ninguna de las circunstancias relatadas por el defensor constituye un hecho nuevo que amerite reevaluación. En efecto, los informes médicos no difieren de los que se realizaron ante los pedidos de arresto domiciliario previos en esta causa”, puntualizó en su escrito la abogada Guadalupe Godoy, enumerando un pedido planteado en febrero de este año y otros tres durante la pandemia.
El jueves pasado, los jueces Sabrina Namer, Néstor Costabel y Rodrigo Giménez Uriburu habilitaron el beneficio de prisión domiciliaria a Etchecolatz, de 91 años, preso en Ezeiza en donde cumple múltiples condenas por delitos de lesa humanidad, entre ellas varias a prisión perpetua. El represor tuvo coronavirus a principios del mes pasado y se recuperó en prisión. Había sido internado en el hospital del penal hacía algunos días.
Al enterarse de la decisión, organismos de derechos humanos, estamentos gubernamentales bonaerenses y nacionales y hasta vecines del Bosque Peralta Ramos la repudiaron y se declararon en estado de alerta. La medida, por el momento no se hará efectiva porque aún falta que definan el TOF platense y otro tribunal federal de Lomas de Zamora.