La situación de necesidad de divisas y las internas del sector volvieron a poner al campo en el eje de la agenda político económica. José Martins, titular de la Bolsa de Cereales, está entre los empresarios del rubro que en un escenario complejo decidieron un acercamiento a la política para trabajar en conjunto en un modelo que, al parecer, comparten con el gobierno de Alberto Fernández: la desprimarización de la producción agropecuaria hacia una gestión de exportación con valor agregado.
En diálogo con Página I12, quien además es portavoz del Consejo Agroindustrial Argentino (CAA), la rama negociadora del campo, explicó cómo evoluciona la negociación con el gobierno para coordinar medidas de estímulo; pidió “hablar con la política y correr a los fundamentalistas de ambas partes” y planteó interrogantes sobre el Impuesto a las Grandes Fortunas.
-Acaban de presentar las perspectivas de la cosecha 2020/2021. Y los números de producción y exportaciones son inferiores en la comparación interanual. ¿Cuál cree que será el nivel de aporte de divisas del sector?
-No hay grandes diferencias si los costos se mantienen. Hay una oportunidad buena si logramos alguna de las medidas de incentivo que estamos proponiendo al gobierno. Si somos capaces de bajar un poco la carga impositiva, bajar retenciones no a cero, pero gradual, más algunos impuestos provinciales, esto se pone en marcha rápido
-El Gobierno está en un contexto de caída en la recaudación por la pandemia, ¿cómo se justificaría una baja de retenciones e impuestos sin dañar las arcas?
-Lo que se recauda menos por retención se compensa por otros lados. Con el Gobierno se habilitó una mesa de discusión y ahora es el turno de que nuestros equipos de economistas muestren todos los ejercicios de simulación, tenemos que convencer de que no afecta al erario público, la idea no es vestir un santo para desvestir a otro.
-La interacción con el Gobierno se hace a través del Consejo Agroindustrial, que rompió la lógica de distanciamiento del campo con el peronismo. ¿Cómo se llegó a ese armado y reuniones con el Presidente y la vice, Cristina Fernández?
-Esto surgió de casualidad en alguna charla con Cancillería cuando parecía que nos íbamos del Mercosur. Hicimos buenos vínculos con los equipos de Felipe Solá. Nos pareció oportuno no solo quedarnos en la protesta sino proponer cosas, hoy es el momento de hacer eso. De ver si somos capaces de convencer a la política argentina de que la agroindustria es el camino para generar divisas y empleo. Necesariamente teníamos que charlar con Massa, Cristina y el Presidente. Es una construcción para articular algo público privado.
-En el gobierno aseguran que ese encuentro también es producto de una maduración del espacio gobernante, luego de guerras tras la Resolución 125.
-De una vez por todas, tenemos que ser capaces de construir consensos. Primero fue dentro de la agroindustria, donde lógicamente hay cortocircuitos, pero para lograrlo pusimos una idea fuerza de poner una política de Estado. Tenemos que estar con todos, y la verdad es que recibimos un fuerte estímulo a trabajar en este sentido. Este espacio no viene a trabajar en temas gremiales ni a reemplazar a nadie.
-Se habló mucho de esa foto con CFK y el Consejo recibió críticas, sobre todo de la Mesa de Enlace y Sociedad Rural. ¿Cómo lo analiza Usted?
-La primera sorpresa fue que ella ya tenía leídos los primeros trazos del programa. Nos preguntó si teníamos un pre proyecto de ley y le dijimos que la idea era trabajarlo en conjunto, no imponer nosotros. Fue una reunión necesaria como tuvimos con todos, incluidos los gobernadores y la oposición. El Gobierno cree que agroindustria es el único sector capaz de lograr esto. Ahora faltan las pequeñas cosas, los detalles.
-Las internas sectoriales del campo parecen muy expuestas hoy. ¿Coincide?
-Hay matices en opiniones, pero tenemos que ir a un modelo distinto. Exportar la mercadería en grano es bueno porque el mundo demanda, pero es malo porque no generamos valor ni empleo. Es una discusión de modelo. Tenemos que ser fuertes en industrializar. El gran debate es que haya incentivos para generar valor y exportar procesado. Campo e industria tiene que trabajar en conjunto, el producto primario no le agrega valor ni empleo a la Argentina.
- ¿En qué plazo podría dar resultados un plan para exportar más?
-Este año está jugado, es para las próximas siembras. Tiene que haber un shock de confianza, el Gobierno tiene que tirar una línea para que el campo baje la guardia de pelea. Últimamente las señales no han sido buenas.
-El sector no ha tenido posiciones muy negociadoras… ¿No observa en la belicosidad de algunos sectores un componente político?
-Hay un componente político ideológico, pero tenemos que ser cautos de ambos extremos y no prestarles atención a los extremos, de ambos lados. Por eso este Consejo tuvo el éxito que tuvo, porque pudo lograr cohesión y sentarse en la mesa con todo el arco político. Por eso hay que correr a los fundamentalismos.
Grandes Fortunas, dólar y especulación
-Se trata en el Congreso el aporte de grandes fortunas. ¿Qué posición tiene?
-Me preocupa cuando uno tiene una industria o un campo, que a lo mejor está valuado en un monto importante expresado en tierra. Si hoy paga un sobre impuesto, se va a tener que endeudar para pagarlo. La carga impositiva en Argentina es muy alta.
-En esa línea y para cuidar las reservas, el Gobierno confirmó nuevas medidas cambiarias y hubo quejas del agro, ¿en qué creen que los afecta?
-En la múltiple cantidad de tipos de cambio. El dólar tiene que ser alto o bajo, pero uno. El comercial es 79 y el que recibe el chacarero es de 50. Y compra a 140 lo importado. En Argentina siempre faltaron dólares y el único que provee es la agroindustria.
- ¿El sector no especula con el dólar a la espera de devaluaciones?
-Trato de ser muy cuidadoso con eso, no sé si es especulación. ¿Cosecho en enero y vendo todo? ¿o me quedo en pesos o vendo a medida que voy necesitando plata? Vende a medida que necesita el productor.
-Algunos consultores aseguran que puede haber un repunte de los precios internacionales de los granos. ¿Ve esa chance como algo real?
-Esta apreciación del yuan hace que los chinos tengan un mayor poder de compra. Hay que aprovechar este veranito.