Como era de esperar, Disney puso en marcha la secuela de El Rey León, la que hasta la fecha es la remake de sus clásicos de animación más taquillera con una recaudación que superó los 1.650 millones de dólares.

Al frente de la producción estará Barry Jenkins. El director de Moonlight toma así la posta de su colega Jon Favreau, quien digirió la nueva versión de animación digital fotorrealista del clásico animado de 1994. El guión estará otra vez en manos de Jeff Nathanson.

La trama de la secuela se mantiene en secreto, aunque según trascendió esta nueva entrega explorará más a fondo la mitología de los personajes, incluyendo la historia de origen de Mufasa.

"Mientras ayudaba a mi hermana a criar a dos niños en los 90, crecí con estos personajes", dice el director. "Contar con la oportunidad de trabajar con Disney para expandir esta magnífica historia de amistad, amor y legado al mismo tiempo que amplió mi trabajo retratando las vidas y las almas del pueblo dentro de la diáspora africana es un sueño hecho realidad", afirma el cineasta.

En su versión original, la remake de El Rey León contó con actores de primera línea para poner voz a sus personajes. Ahí estaban Donald Glover como Simba, Beyoncé interpretando a Nala, Chiwetel Ejiofor que puso voz al villano Scar, Seth Rogen como Pumbaa, Billy Eichner como voz de Timon, John Kani comio Rafiki, John Oliver como Zazu o James Earl Jones que puso voz a Mufasa.