El ministro de Educación, Nicolás Trotta, se reunió este miércoles con el Defensor del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires, Alejandro Amor, y la Defensora de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes de la Nación, Marisa Graham, para analizar lo que consideró "inconsistencias en la entrega de la información" solicitada al Gobierno porteño para poder distribuir "las 6.500 netbooks destinadas a la población de estudiantes con nulo o muy bajo contacto con la escuela".

Del encuentro participó también, el titular del Ente Nacional de las Comunicaciones (Enacom), Claudio Ambrosini, quien arbitrará los recursos de conectividad necesarios para velar por los derechos de las y los estudiantes en situación de vulnerabilidad, según indicó un comunicado de la cartera educativa.

"Las inconsistencias y dilaciones en la entrega de la información necesaria para la georeferenciación y efectiva distribución del equipamiento por parte del Gobierno de la Ciudad, fueron el eje del encuentro", indicó el escrito.

Trotta agradeció que el Defensor del Pueblo y de la Defensora de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes se hayan involucrado en el tema y solicitó que "aceleren y supervisen la distribución del equipamiento tecnológico en caso de que el Gobierno de la Ciudad acepte recibirlo o, caso contrario, interceda en la recepción de las netbooks para que lleguen a las y los estudiantes que necesitan la respuesta del Estado para garantizar su continuidad pedagógica".

El ministro hizo hincapié en que "tenemos que resolver las urgencias” porque “nuestras niñas y niños no pueden seguir esperando y es necesario que retomen el contacto con los procesos de aprendizaje. Solicitamos a Alejandro Amor y Marisa Graham que velen por los derechos de las y los estudiantes en situaciones de mayor vulnerabilidad para poder garantizar el cumplimiento del derecho a la educación".

El 3 de septiembre, Educación ofreció los 6.500 equipos y conectividad para resolver la situación de la población de estudiantes que el Gobierno de la Ciudad manifestó que se encontraba desconectada de la escolaridad, habiendo mantenido nulo o bajo contacto con la escuela.

El ministerio nacional solicitó a la Ciudad la georeferenciación de los 6500 estudiantes para poder acercarles las computadoras, pero hasta el día de la fecha, la Ciudad envió información inconsistente para poder realizar la entrega correspondiente de los equipos, según indicó el Ministerio de Educación.