El ex director Ejecutivo de la Anses, Alejandro Vanoli, fue sobreseído en la causa en la que se investigaba el presunto incumplimiento de deberes, en relación a la salida masiva de beneficiarios de jubilaciones a los bancos para cobrar el 3 de abril, en los primeros días de la cuarentena por la pandemia de coronavirus.
La decisión la tomó el juez Sebastián Casanello, a cargo en forma interina del Juzgado Federal número 12, donde está radicada la causa iniciada por una denuncia de la diputada nacional Mónica Frade, de la Coalición Cívica. La denuncia también alcanzó al titular del Banco Central, Miguel Pesce, por "provocar una intempestiva y generalizada ruptura del Aislamiento Preventivo, Social y Obligatorio" que generó la pandemia.
En la resolución judicial, Casanello determinó ahora que "no se vislumbra, a la luz de las constancias objetivas del expediente, un actuar delictuoso por parte del exdirector ejecutivo de la Anses". En esa línea, el magistrado, que tomó a su cargo el juzgado federal que encabezaba el hoy exjuez Rodolfo Canicoba Corral donde estaba radicada la causa, subrayó que "el estudio integral de los elementos probatorios aunados al presente expediente permite resolver de manera definitiva, la situación procesal" de Vanoli.
En tal sentido, Casanello dispuso que "habrá de otorgarse credibilidad a la versión desincriminante brindada" por Vanoli "frente a la hipótesis acusatoria, por lo que deviene como resultado necesario adoptar la solución liberatoria". Vanoli dejó su cargo poco después del 3 de abril y lo reemplazó María Fernanda Raverta.
En un dictamen entregado en su momento a Canicoba Corral, el fiscal Guillermo Marijuan había pedido citar a Vanoli por presunto "incumplimiento de deberes de funcionario público", por no haber implementado medidas para evitar las aglomeraciones masivas el 3 de abril, cuando se reabrieron los bancos.
Ese día, los bancos volvieron a abrieron sus puertas para permitir el pago de haberes de jubilaciones y subsidios en medio de la cuarentena y, si bien se recomendó que sólo fuesen las personas que no contaban con tarjetas de débito o que debieran realizar "trámites indispensables", se formaron largas filas desde la madrugada.
Ante la aglomeraciones y filas muy numerosas donde en muchos casos no se respetaba el distanciamiento social dispuesto como medida preventiva frente a la pandemia de coronavirus, el Banco Central dispuso que las entidades abrieran sus puertas durante ese fin de semana.
Casanello, en los fundamentos de la resolución, expuso que "deviene verosímil lo alegado por Vanoli en relación a que estudios del Banco Central" concluyeron que muchas personas que acudieron aquél viernes a los bancos "fueron a realizar operaciones que no se encontraban autorizadas (extracción de dólares, plazos fijos, inversiones, etc)".
