El Museo del Prado inaugura la muestra “Invitadas. Fragmentos sobre mujeres, ideología y artes plásticas en España (1833-1931)” en la que se expondrán obras de pintoras que estaban guardadas en almacenes y depósitos y otros cuadros que dan cuenta de cómo era la imagen de la mujer que propagó el Estado burgués en la España del siglo XIX y primeras décadas del XX.
La muestra, que se podrá visitar hasta marzo del año que viene, se titula “Invitadas” porque “las mujeres eran meras invitadas a las que se acoge con cortesía, pero de las que se espera que se marchen educadamente a la hora acordada”, explicó Carlos G. Navarro, comisario de la nueva exposición del Prado. El museo reabrió sus puertas a principios de junio, luego de haber permanecido cerrado por la pandemia de coronavirus.
Muchas de las obras nunca habían sido expuestas y el museo hizo un trabajo para reatribuir autorías -muchas de las artistas firmaban con los nombres de sus esposos o permanecían anónimas-, hacer nuevas categorizaciones y restauraciones porque muchas pinturas presentaban graves daños. Las obras pertenecen tanto al Prado, como al Patrimonio Nacional español y colecciones públicas y privadas.
Las obras en exposición
La primera parte de la muestra se concentra en pinturas que permiten ver el estereotipo de la mujer del ideal burgués, que el Estado, como promotor de las Bellas Artes, legitimó con encargos, premios y adquisiciones. Entre las obras que se exponen se encuentran: “Falenas”, de Carlos Verger; “Soberbia”, de Baldomero Gili y Roig o “La Reina doña Juana la Loca, recluida en Tordesillas con su hija, la Infanta doña Catalina”, de Francisco Pradilla, entre otras.
La segunda parte de la muestra comprende obras de pintoras mujeres como Rosario Weiss (1814-1843) y Elena Brockmann (1867-1946). Esta última pudo conocer el éxito en vida, asistió a la Academia de Bellas Artes y pintó escenas históricas. En la muestra se expone “Paso de una procesión por el claustro de San Juan de los Reyes, Toledo”.
Otras de las artistas que incorpora “Invitadas” son María Luisa de la Riva, célebre por pintar flores y frutas, y Rosa Bonheur, pintora lesbiana que también gozó de éxito en vida y fue la primera en recibir la Legión de Honor francesa y la Gran Cruz de Isabel la Católica por su méritos artísticos. “El Cid”, uno de los cuadros de Bonheur, ya había sido vedette en la exposición “La mirada del otro. Escenarios para la diferencia” que hizo el Prado en 2017 para abordar la temática LGBTIQ+ en el arte.
Asimismo, se podrán contemplar obras de Rosario Weiss, una artista independiente y de ideas liberales. Weiss fue discípula de Goya y el los últimos años ha sido rescatada en exposiciones en el Museo Lázaro Galdiano y la Biblioteca Nacional de España.
La muestra recupera también la obra de las pintoras Julia Alcayde, Lluïsa Vidal, María Roësset y Antonia de Bañuelos, entre otras. “Es una pintora de una calidad extraordinaria por la que yo lucharía para incorporar a la colección permanente”, dijo el comisario de la exposición sobre el trabajo de Bañuelos.