El presidente de Estados Unidos Donald Trump volvió a minimizar la gravedad del coronavirus al afirmar que es bastante menos letal que una gripe. De vuelta en la Casa Blanca el mandatario seguirá siendo monitoreado por su equipo de salud tras haber abandonado el hospital militar en el que se encontraba. El magnate republicano manifestó su deseo de participar en el debate presidencial del próximo 15 de octubre en Miami pese a haber dado positivo de la covid-19 el viernes pasado. Por su parte Joe Biden, candidato del Partido Demócrata, dijo que estaba dispuesto a debatir si los científicos daban el visto bueno. Una encuesta publicada reciente por la CNN ubica al exvicepresidente casi quince puntos por delante Trump para las elecciones del próximo 3 de noviembre.
Una gripe más
El líder republicano volvió a comparar el coronavirus con una gripe común horas después de regresar a la residencia presidencial en Washington. "¡La temporada de la gripe se acerca! Mucha gente todos los años, algunas veces más de 100.000, y pese a la vacuna, muere por la gripe. ¿Vamos a cerrar nuestro País? No, hemos aprendido a vivir con ella, justo como estamos aprendiendo a vivir con la COVID, en la mayoría de poblaciones mucho menos que letal", indicó el mandatario en Twitter. El mensaje fue advertido por Twitter como contenido potencialmente dañino, por lo que la red social no dió la opción de compartirlo. La cadena CNN calificó de "falsa" está afirmación. Para ello mostró datos oficiales según los cuales 178.000 personas murieron de gripe en el país entre 2015 y 2020, mientras que más de 210.000 lo hicieron de coronavirus solo este año.
El mandatario se mostró entusiasmado con el próximo debate presidencial pese a haber sido diagnosticado positivo de coronavirus hace menos de una semana. ”Estoy deseando (participar en) el debate de la noche del jueves, 15 de octubre en Miami. ¡Será genial!", escribió el presidente en Twitter. Horas más tarde el líder republicano publicó en la red social: "¡SINTIÉNDOME FENOMENAL!". Los médicos de Trump habían informado el lunes que seguían con atención su estado de salud. "El presidente no está fuera de peligro del todo, pero (...) no hay nada que estemos haciendo acá que no se pueda hacer en su residencia", había explicado Sean Conley, doctor personal del presidente. Junto a él otro miembro del equipo médico informó que el mandatario no presentaba ninguna dificultad respiratoria. Además dijo que estimaban que la ventana de tiempo en que un paciente como Trump podría contagiar a terceros era de 7 a 10 días. Actualmente hay más de una docena de positivos en el entorno de Trump. Entre ellos la primera dama Melania Trump, la portavoz presidencial Kayleigh McEnany, y el jefe de su campaña Bill Stepien.
Por su parte, Biden manifestó que participaría del encuentro si los especialistas avalaban su realización. "Si los científicos dicen que es seguro y las distancias son seguras, entonces creo que está bien. (…) Haré lo que los expertos digan que es lo apropiado", dijo el exmiembro del Ejecutivo norteamericano. Tras el primer debate realizado en Ohio, el segundo está programado para el 15 de octubre en Miami (Florida) y el tercero el 22 de octubre en Nashville (Tennessee). La celebración de esos cara a cara estaba en duda tras el positivo de Trump. La Comisión de Debates Presidenciales, una organización sin fines de lucro que patrocina estos eventos desde 1988, anunció que el mismo será moderado por Steve Scully, editor de política de la cadena C-SPAN. A diferencia del primer debate este se realizará con preguntas del público.
Número positivos para Biden
El 57 por ciento de los votantes estadounidenses apoyaría al candidato demócrata según la encuesta de CNN. En tanto que el 41 por ciento se decantaría por el actual presidente de EEUU. Estos números constituyen la ventaja más alta de Biden hasta el momento. El sondeo se realizó después del primer debate presidencial y, en su mayor parte, luego de que se conociera que Trump había contraído la covid-19. El exvicepresidente aventaja al magnate republicano en varios asuntos que los votantes consideran de importancia a la hora de elegir. En cuanto a la pandemia de coronavirus, el 59 por ciento mostró su preferencia por el demócrata y el 38 por ciento por el actual inquilino de la Casa Blanca. En sanidad el 59 por ciento apoya a Biden y el 39 por ciento a Trump.
Además, los votantes también prefieren la postura de Biden en referencia a la desigualdad racial en EEUU, ya que en este campo recibió el apoyo del 62 por ciento, en tanto que Trump fue elegido por el 36 por ciento. En cuanto a las nominaciones para el Tribunal Supremo tras la muerte de la jueza Ruth Bader Ginsburg, un 57 por ciento apoyó la postura del demócrata frente a un 41 por ciento a favor del presidente. En referencia al crimen y la seguridad, un 55 por ciento de los votantes se decantó por el candidato demócrata y un 43 por ciento lo hizo por Trump. Otros asuntos en los que Biden superó ampliamente a Trump es que sería el candidato que más puede unir al país (61 frente a 33 por ciento), parece más honesto (58 contra 33 por ciento) y tiene un plan claro para solucionar los problemas que afectan a EEUU (55 contra 39 por ciento). El único asunto en el que están más parejos es respecto a la gestión económica. Allí Biden obtuvo un 50 por ciento y Trump un 48 por ciento. Por otro lado, los índices de popularidad del exvicepresidente alcanzaron un 52 por ciento. Por su parte, el 39 por ciento de los votantes tienen una visión positiva acerca del actual mandatario.
También creció el entusiasmo por votar en los comicios respecto a las elecciones de 2012 y 2016, según reveló otra encuesta de Gallup. El 67 por ciento de los encuestados afirmó estar más motivado por ejercer su derecho al voto, un porcentaje más en línea con los niveles de 2004 y 2008. Por partidos, el 80 por ciento de los demócratas y el 75 por ciento de los republicanos dijeron estar más entusiasmados.