Luego de las habituales negociaciones con el Gobierno nacional, la administración de Horacio Rodríguez Larreta se encaminaba a habilitar nuevamente los shoppings (con aforo, esto es, con un número máximo de personas), también el servicio doméstico, pero solo para residentes en la Ciudad de Buenos Aires y sin uso del transporte público. Esto representa menos del 30 por ciento de las trabajadoras, que viven en su gran mayoría en la provincia de Buenos Aires y que quedaron para una siguiente fase.
Desde la gestión de Larreta habían propuesto también que los restaurantes volvieran a funcionar en sus salones internos con una capacidad muy limitada (25 por ciento de la total), pero esa propuesta no estaba siendo aceptada por el Gobierno nacional. Tampoco había grandes expectativas de que la acepten por ahora, por lo que quedará para una nueva etapa. También se estaban estudiando algunas nuevas reuniones sociales, siempre al aire libre, y habilitar algunos deportes que son individuales pero se pueden hacer en grupos pequeños, como el tenis (dobles), paddle (dobles) o los deportes náuticos.
Para el sistema educativo, tras lo acordado con el Consejo Federal de Educación, habrá un regreso paulatino: empezarán por los últimos grados de las escuelas técnicas, luego quinto año de las secundarias y después estudiantes de séptimo grado de la pimaria. Será en grupos de hasta diez personas, que no se podrán mezclar entre sí (siempre es el mismo grupo). Irán entre dos y cuatro veces por semana y los turnos serán de una a cuatro horas (entre turno y turno se desinfectarán los espacios). Toda la concurrencia será voluntaria.