En la apertura del juicio oral contra el policía Luis Chocobar, imputado por el delito de “homicidio agravado en exceso del ejercicio del deber”, su defensa solicitó una vez más la suspensión del debate y que se realice un juicio por jurados populares. Ante tal planteo, rechazado por las otras partes que intervienen en el proceso, el Tribunal Oral de Menores 2 dispuso un cuarto intermedio hasta el 21 de octubre, cuando emitirá su fallo sobre el pedido.
El caso tiene particular relevancia porque el accionar de Chocobar fue avalado públicamente por el ex presidente Mauricio Macri y puesto como ejemplo de actuación policial por la ex ministra de Seguridad Patricia Bullrich. Lo ocurrido dio lugar a la llamada Doctrina Chocobar, un claro aval al gatillo fácil policial.
En síntesis, nada se avanzó en el juicio, al que no tiene acceso la prensa, porque se desmintió que el policía haya prestado declaración indagatoria ante los jueces, como había dicho inicialmente su abogado defensor, Fernando Soto. Chocobar está imputado por haber matado de dos disparos en la espalda a Juan Pablo Kukoc, de 18 años, luego de perseguirlo a él y a otro joven menor de edad.
Los dos habían apuñalado a un turista estadounidense para robarle la cámara de fotos. El segundo joven está preso y acusado, en el mismo juicio que tiene por imputado a Chocobar, por “tentativa de homicidio” y “tentativa de robo”.
La cámara de fotos fue recuperada poco después del hecho, ocurrido en diciembre de 2017 en el barrio porteño de La Boca. El policía le disparó a Kukoc cuando el joven estaba tirado en el piso, sin que su actitud representara un riesgo personal para Chocobar.
A la salida de los tribunales de Comodoro Py, el policía se retiró sin hacer declaraciones a los periodistas que aguardaban fuera de la sala, pero su abogado Soto dijo que su representado había hecho ante los jueces una breve declaración.
El defensor dijo que Chocobar había dicho en la audiencia que él “cumplió con el entrenamiento y la capacitación de tiro” para saber cómo actuar y que al disparar sobre Kukoc, tirado en el piso, sólo había “cumplido con la ley”.
Por el hecho de tratarse de un juicio en el que también está imputado alguien que era menor de edad al momento de lo sucedido, sólo está reservado a las partes y la prensa no tiene acceso. Una fuente le dijo a Página/12 que Chocobar “no prestó declaración indagatoria”, sino que sólo dijo su nombre y otros datos personales, al comenzar la audiencia, un trámite habitual en el inicio del proceso oral.
Con posterioridad, el propio Soto aclaró en diálogo con la agencia de noticias Télam: “Me confundí, estaba previsto que declare, pero no llegamos a hacerlo”, debido al nuevo planteo de suspensión del juicio. El inicio de la audiencia estaba previsto para las 11 y Chocobar, con un barbijo de color verde, llegó una hora antes con su abogado. Al entrar presentaron un escrito pidiendo la suspensión del juicio y luego Soto expuso ante los jueces.
Un grupo de personas aplaudió al policía cuando llegó. Antes habían colocado una serie de carteles en las vallas ubicadas en la vereda de la sede judicial. Los mensajes decían “Ni un policía menos” y “Poner orden no es represión”.
El policía llega al juicio en libertad, acusado por la fiscalía de “homicidio agravado por exceso en el cumplimiento del deber”, que tiene una pena máxima de cinco años. La querella que representa a la familia de Kukoc, encabezada por Pablo Rovatti, de la Defensoría General de la Nación, adelantó en la apertura de la audiencia que lo acusará de “homicidio agravado” por su condición de policía. De aplicarse esa calificación, la pena sería de prisión perpetua.
En el mismo juicio, a cargo del tribunal integrado por Fernando Pisano, Jorge Apolo y Adolfo Calvete, está acusado el joven que acompañaba a Kukoc. El turista asaltado fue Frank Joseph Wolek, de 60 años, que se recuperó de las heridas y regresó a su país.
En su nuevo intento porque el caso sea analizado en un juicio por jurados, los defensores de Chocobar, el nombrado Soto y el ex juez Luis Cevasco, se basaron en un nuevo planteo que hicieron ante el Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de Buenos Aires. El pedido ya fue rechazado por el juzgado de menores, por la Cámara de Casación Nacional, que consideró “inadmisible” el planteo.
Luego acudieron a la Corte Suprema de Justicia, pero la Cámara de Casación volvió a rechazarlo. Se presentaron en queja ante la Corte, que todavía no se expidió, y ahora, lo novedoso y no usual es que recurrieron ante el Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad, un órgano que no está por encima de la Justicia Nacional.
Todas las otras partes, que son cuatro (la fiscalía, la querella, la defensoría de menores y el defensor particular del joven imputado, Albino Stefanuolo), se opusieron al planteo. La intervención más rotunda fue la de Stefanuolo, quien señaló la situación particular de su representado, que está detenido, sin condena, desde hace más de dos años, esperando la posibilidad de defenderse en el juicio oral.
Luego de las exposiciones, los jueces resolvieron pasar a un cuarto intermedio hasta el miércoles 21 de octubre, cuando el tribunal se expedirá sobre el planteo de la defensa de Chocobar.