El cuestionado proyecto de enmienda constitucional para permitir la reelección presidencial en Paraguay quedó ayer en suspenso ante la expectativa por la mesa de diálogo convocada para hoy por el presidente Horacio Cartes, a pedido del papa Francisco.

La Cámara de Diputados había postergado hasta ayer una sesión para abordar el proyecto de enmienda que fue aprobado por un grupo de senadores la semana pasada y que desató el viernes violentas manifestaciones que dejaron un muerto, 30 heridos y un incendio en el Congreso.

Pero el presidente de la Cámara de Diputados, Hugo Velázquez, dejó en suspenso la sesión e instó a la oposición a concurrir a la mesa de diálogo, tal como pidió el papa Francisco. 

“Yo creo que vamos a concurrir”, dijo el presidente del Congreso y titular del Senado, Roberto Acevedo, perteneciente al opositor Partido Liberal, quien fue herido durante los enfrentamientos del viernes. Además, Acevedo, anunció que propondrá el retiro del proyecto de enmienda en la mesa de diálogo y subrayó que asistirá a la reunión en su condición de presidente del Senado y no como militante del Partido Liberal. Sin embargo, el presidente de este partido, Efraín Alegre, dijo que no se sentará en la mesa de diálogo en tanto no se retire el proyecto y hasta que no se tomen medidas contra los altos cargos policiales responsables del operativo en el que murió un joven dirigente de su agrupación. 

De aprobarse la reelección, Cartes podría volver a ser candidato a la primera magistratura al igual que el ex presidente de izquierda Fernando Lugo (2008-2012, destituido tras un juicio político), cuyo sector también apoya la reforma constitucional. “A nadie le es desconocido que vivimos en una sociedad en crisis. Una sociedad violenta. Pero la violencia nunca, nunca fue un camino de solución ante los problemas y ante las crisis. Por eso, hoy más que nunca tenemos que seguir apostando por la paz y la participación democrática de todos”, aseguró Lugo en un comunicado.