El Concejo tratará mañana el pedido del intendente Pablo Javkin para emitir bonos de cancelación de deuda anteriores al 31 de diciembre de 2019 por 700 millones de pesos. Con la autorización del legislativo local, los bonos se podrán utilizar para cancelar deudas con el municipio (TGI, Drei, multas) y para su depósito en garantía para contrataciones cuando llama a licitación. Entre las modificaciones al mensaje enviado por la intendencia, una de las más relevantes fue la que planteó el bloque Ciudad Futura-FSP para que se excluyeran expresamente de la autorización las deudas por contribuciones compensatorias urbanísticas y convenios urbanísticos. "El Ejecutivo pudo hacer el uso de una herramienta que fue autorizada en diciembre para consolidar deuda que nosotros no tomamos, y que necesitamos poder encontrar otra forma de pagarla para hacer más sostenible la deuda municipal ya existente y que el intendente se encontró cuando asumió", señaló el concejal Fabrizio Fiatti (Creo).

El articulo segundo de la ordenanza que tuvo despacho ayer en las comisiones de Presupuesto y Gobierno, y que se discutirá mañana en el recinto, establece que el destino de los bonos será para la cancelación de las obligaciones vencidas o de causa o título anterior al 31 de diciembre del 2019. La autorización, que representa un alivio financiero para las arcas del municipio, cuya recaudación sufrió una baja considerable por la pandemia, es para emitir bonos de cancelación hasta 700 millones de pesos. Pero en una primera etapa, y para ver cómo funciona el mecanismo, la secretaría de Hacienda emitirá bonos por 200 millones de pesos.

"Se trata de un proceso de consolidación de deuda, no de emisión de deuda. La discusión que se dio es que si era deuda el Concejo lo tenía que autorizar, y lo que estamos haciendo es uso de una herramienta que el cuerpo autorizó en diciembre pasado cuando adhirió a la ley provincial de Presupuesto, que en su artículo 54 creaba una herramienta para que los ejecutivos puedan consolidar la deuda existente a diciembre al 2019", explicó el concejal Fiatti.

"Entre esas herramientas estaba utilizar medios alternativos de pago, y estos bonos no son equivalentes a una letra o bonos de deuda pública, si no que permiten pagar una deuda como si fuera un cheque o un pagaré. El rol del Concejo es brindarle la posibilidad al que es acreedor de la Municipalidad; para que recibiendo ese bono, si tiene deudas contra el Municipio, las pueda usar para cancelarlas. Se pueden pagar tributos municipales, se pueden ofrecer como garantía en una licitación, pero lo que no se puede hacer es pagar compensaciones urbanísticas", agregó el edil oficialista. 

Por su parte, la titular de la Comisión de Presupuesto, Lorena Carbajal (PS), señaló que son instrumentos de cancelación de deuda ya existente que pueden recibir los proveedores y todos aquellos que tengan derechos de cobro contra la Municipalidad. "Entre sus condiciones, el bono de cancelación tiene la posibilidad de pagar un interés, aparte de la devolución del importe adeudado. Los recibe un proveedor o un acreedor del municipio pero luego los puede transferir, son como obligaciones negociables que pueden circular como medios de pago, se pueden transferir a terceros", apuntó la edila.

La ordenanza refiere que el Ejecutivo deberá comunicar semestralmente al Concejo Municipal la evolución del Programa, con el detalle de los términos y condiciones de los bonos emitidos especificados en el artículo 1º del presente decreto; así como los montos de bonos utilizados como garantía de los procesos de licitación y en concepto de cancelación de deudas tributarias y no tributarias según artículo 4º del presente decreto, especificando los tributos y obligaciones para las cuales han sido utilizados.