Leer el dictamen completo en el que el fiscal Carlos Stornelli promueve una denuncia contra Miriam Lewin presentada por un grupo de diputados macristas contra la Defensora del Público es una experiencia desconcertante. Ningún abogado, magistrado ni periodista sensato puede creer lo que allí escribió. Las que siguen son las afirmaciones más alejadas de la realidad y del derecho.
1--Señora Juez, una seria inquietud sobrevuela la Argentina, quizás una de las más peligrosas, aquella que se refiere a la amenaza a las libertades individuales. ¿Será que existen grupos cuyo perverso plan sea ése?
2--¿Será que algún o algunos trasnochados, nostálgicos del medioevo, quieren avanzar sobre la libertad ambulatoria primero, la de expresión después, y finalmente la de pensamiento?
3--¿Volveremos a los comisarios políticos y a los delatores jefes de manzana?
4--¿Se castigará a la prensa, especialmente libre, otorgándosele a la esclava patente de corso?
5--¿No ha muerto la mazorca?
6--Yo mismo he sido objeto de la mentira calumniosa, obscena, violenta y descarada. Jamás cuestionaría la libertad para hacerlo. Elijo siempre la libertad (Stornelli está procesado por el juez Alejo Ramos Padilla por haber integrado una asociación ilícita junto con el falso abogado Marcelo Sebastián D’Alesio. Su procesamiento está esperando confirmación en la Cámara Federal de Mar del Plata)
7--¿Ha mutado el virus del fascismo y en realidad no ha muerto?
8--¿Se dictará una cuarentena mental?
9--¿Será que Robert Woodward y Carl Bernstein podrían ser hombres libres en la Argentina; o habrían sido DESARTICULADOS por algún empleado de un oscuro Buró?
10--Impedir que ésta y cualesquiera otras de semejante osadía se naturalicen es en este momento responsabilidad suya y nuestra.