A tres meses del ataque sexual y femicidio de Rocío Vera, la adolescente de 14 años que fue violentada por al menos siete hombres en Reconquista, la querella advirtió que uno de los imputados busca ser liberado por testimonios que intentan ubicarlo en otro lugar al momento del hecho. "Supuestos testigos dijeron que estuvo trabajando y después comiendo con ellos hasta las 2.30 de la mañana. ¿Tres meses después? No es creíble", cuestionó la abogada Luciana González, que representa a la familia de la víctima y a organizaciones que exigen justicia por la "brutal y atroz" agresión que terminó con la vida de la joven que además estaba embarazada de ocho semanas. "La prueba fundamental será el resultado de ADN que estamos esperando y que si bien siempre se demora, como sucedió en el caso de Rosalía Jara en la misma ciudad, por la pandemia todo tarda más". Al mismo tiempo, manifestó desacuerdo con la Fiscalía que acusó a los imputados con diferentes grados de responsabilidad: "La violaron, la tiraron contra un alambrado, la volvieron a violar y la dejaron morir después de agonizar por horas: es más que evidente que son todos coautores", aseguró sobre la figura de femicidio. También cuestionó el accionar policial en la búsqueda.
Rocío fue asesinada entre la 1.30 y las 2 de la madrugada del domingo 12 de julio. Los hechos comenzaron en una casa abandonada de Reconquista, en el norte de Santa Fe. El fiscal Aldo Gerosa dijo que allí fue "golpeada y forzada”. Cinco hombres de entre 21 y 30 años fueron imputados tres días después del hecho y quedaron en prisión preventiva. Juan Godoy, Leonardo Godoy, Brian Altamirano, Luis Quintana y Pascual Fagundes están acusados por someter a la niña en su integridad sexual; mientras que el último fue señalado como uno de los autores del crimen (con uno de los dos adolescentes implicados en la Justicia de Menores), otros tres como partícipes primarios, porque “sujetaron y golpearon a la víctima”; y el quinto como partícipe secundario, ya que "colaboró en el traslado y ocultamiento del cuerpo”.
Para la querella --que representa a la madre y hermana de la víctima y a las organizaciones Democracia Directa, MEDH y Juanito Laguna-- hubo "coautoría en el hecho"; es decir que el accionar de todos derivó en el resultado final. "Todos actuaron y la dejaron morir después de agonizar durante horas en un descampado", dijo González, al frente de la querella, junto con Carolina Walker. Ante la gravedad de ese accionar contra la niña advirtió que la defensa de Quintana --imputado como partícipe--, presentó a dos personas que dieron un relato "totalmente inverosímil" en entrevistas, como "supuestos testigos". "Dijeron que estuvo trabajando y luego comiendo con ellos, hasta las 2.30 de la mañana. Aparecen tres meses después, justo en un cambio de defensa", dijo la abogada. Y cuestionó: "¿Van a traer a cualquiera a decir que los siete estuvieron hasta esa hora trabajando? ¿Los van a largar con entrevistas a personas de dudosa credibilidad cuando todavía no tenemos los resultados de ADN?", insistió ante la posibilidad de que se pida una nueva audiencia para revisar la detención. "No tienen arraigo, trabajo, familia, nada. Si quedan en libertad, no los vamos a encontrar más", aseguró sobre los riesgos para la investigación.
Por otro lado, planteó que como querella no descartan que haya habido un "entregador", por lo que siguen investigando cómo llegó Rocío al lugar. "También estamos viendo el tema de las responsabilidades estatales porque creo que esto se podría haber evitado. Todo ocurrió en un lugar que había sido denunciado por vecinos, por otros hechos, pero además porque el mismo día los padres indicaron dónde buscarla y la termina encontrando el hermano, no la policía. Como estuvo varias horas agonizando, quizás la encontraban con vida", dijo.
Rocío salió de su casa el sábado. El domingo su mamá denunció la desaparición, y el lunes por la tarde su cuerpo fue encontrado ya sin vida en un descampado hasta donde fue arrastrada. Cuando hizo las imputaciones, Gerosa indicó que los acusados "llevaron a la víctima a un pastizal, donde fue nuevamente abusada”. Rocío murió allí tras agonizar como resultado de "un traumatismo de cráneo, golpes, heridas y fracturas”.