La Cámara de Panaderos de Salta informó que el kilo de pan francés pasará a costar $120. La última suba en este tipo de producto se dio en agosto del año pasado y lo llevó a $100, precio que se mantuvo hasta hoy. En el caso de las especialidades, subirán casi un 15%, ya habían tenido un aumento del mismo porcentaje en mayo de este año.
La Cámara que nuclea a los panaderos sostuvo que hubo un incremento constante en los insumos y que se encuentran en la imposibilidad de pagar las deudas que arrastran desde antes.
El presidente de la Cámara de Panaderos de Salta, Daniel Romano, dijo que el gobierno de Mauricio Macri fue "un desastre", dado que fueron muy golpeados y tuvieron que declarar la emergencia del sector por primera vez en su historia. En cuanto al gobierno de Alberto Fernández, dijo que "no pudo hacer nada" por la llegada de pandemia, y está imposibilitado de tratar en profundidad la situación económica.
Añadió que el contexto de emergencia sanitaria que se inició en marzo profundizó la crisis y desde ese tiempo vienen registrando caídas en las ventas que van entre el 30% y 40%, dependiendo de los lugares, siendo el casco céntrico de la ciudad de Salta el más afectado.
"Hemos tratado de aguantar el precio del pan francés, que desde hace un año y dos meses no tenía un aumento", afirmó Romano. La decisión de la Cámara fue sugerir aumentar el kilo a $120, señalando que serán las pequeñas y medianas empresas quienes determinarán si optan o no por el aumento.
Para el caso de las especialidades, habrá una segunda suba en el año y será de un promedio del 15%. La principal razón es el aumento en los insumos, misma situación que se dio en mayo de este año cuando también se aumentó el 15% en la elaboración de facturas, tartas, tortas, tortillas, entre otros productos.
La harina, el principal insumo, subió un 45% desde enero hasta los primeros días de octubre. Según Romano, varios gerentes de molinos de trigo le confirmaron que los incrementos seguirán. En el caso de los insumos plásticos, como bolsas, bandejas y papeles, el costo creció entre un 7% y 10% en la última semana. Mientras que el huevo y el azúcar siguen aumentando desde los últimos días de septiembre.
Romano dijo que al costo de los insumos se sumó la economía de sus compradores que es "muy complicada". Sostuvo que hubo un incremento de la elaboración de pan casero y eso se manifiesta en las distintas esquinas de las ciudades de Salta. "Es una economía de subsistencia", consideró, aunque dijo que es una competencia hacia el sector.
"Todo es un combo donde la mayoría de nuestro sector está endeudado", advirtió. Ante ello, dijo que así como el Gobierno nacional logró renegociar la deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI), lo mismo debería hacer el gobierno de Gustavo Sáenz con las empresas privadas de la provincia.
Señaló que es necesario que "se haga una quita" en las deudas. Esto reúne a las que afrontan desde el macrismo, las que surgieron actualmente como consecuencia de la pandemia y la moratoria que se debe enfrentar ante los incumplimientos de pagos que ya asumen las empresas panaderas. "Creo que todas las Pymes nos tenemos que sentar con el gobierno para que haya un quita de la deuda", reiteró.
Los dueños de las panaderías señalan la imposibilidad de pago. Si bien algunos recibieron la ayuda del Programa Nacional de Asistencia al Trabajo (ATP), otros no pudieron hacerlo y esto derivó en que pidieran créditos bancarios para pagar los sueldos. "Al no tener ATP y estar sin ventas, tomamos créditos que hay que devolver en un futuro cercano", añadió Romano.
En ese sentido, cuestionó que la deuda acumulada es "una mochila que nadie quita" y dijo que eso hace que sea complicado sobrellevar al sector. Aseguró que las empresas no están recaudando, sino que "están intentando sobrevivir cuidando los puestos de trabajo".
Además, reconoció que ante cada aumento saben que "cae la venta" y por eso, cada empresario evaluará los modos de aplicar el incremento.
La situación del centro de la capital es quizás la más crítica puesto que muchas panaderías no tuvieron ventas por las medidas de aislamiento social, preventivo y obligatorio que impidió la llegada de las personas al centro de Salta. La circulación "nunca es lo que era antes". "La gente va al centro a hacer sus compras y trámites esenciales y vuelve a sus casas", manifestó Romano. En contraposición, dijo que las ventas en los barrios sí tuvieron un incremento.
