El 17 de octubre de 1945 nació el peronismo. Para los republicanos de aquella época fue un movimiento fascista. El fascismo pedía elecciones inmediatas. Los republicanos proponían todo el poder a la Corte Suprema. Diez años después, hartos de tanto fascismo, los republicanos bombardearon la Plaza de Mayo al mediodía de un día de semana. Tres meses después los republicanos movilizaron parte del ejército y lograron desterrar el fascismo.

El gobierno de los republicanos fusiló inocentes y metió presos a centenares de fascistas, prohibió el nombre de los jefes fascistas,  las canciones y los símbolos. Durante 18 años el país estuvo libre de fascismo. Lamentablemente para los republicanos el fascismo volvió con más fuerza en el siglo veinte, pero ellos siguen peleando para recuperar a la República.

Mi amigo Jorge Graciosi me comentٕó: en el '45 los obreros cruzaron nadando el Riachuelo para llegar a la Plaza de Mayo. Esta vez fue la clase media que llegó de los barrios en automóvil. 

Una ocurrencia:

La situación transcurre en la casa de la familia Rojas. La nieta adolescente habla con su abuelo

-- Leí los recortes de los diarios. El bisabuelo era un héroe, el pueblo lo amaba.

--Fue el gran héroe de la Revolución. El derrocó al tirano prófugo.

--Pero, abuelo, Perón tiene homenajes, en cada pueblo algo se llama Perón. En Buenos Aires una de las calles más importante se llama Perón. El nombre del bisabuelo no aparece ni en una cortada.

--Los pueblos son ingratos.

--Abuelo mirá si dentro de 30 años le cambian el nombre y le ponen Cristina Fernández de Kirchner.

Pausa

--Abuelo!

--Abuelo!!

--Abuelo!!! Un médico por favor!

Viene a mi memoria de adolescente un lejano pariente, simple empleado de la municipalidad de San Isidro que me contaba cómo había sido su luna de miel: " Pasamos 15 días con mi mujer en el centro de Buenos Aires. Ibamos todas las noches al teatro o al cine y después a cenar al 'Sorrento', típico restoran de la clase media porteña ¡Cómo no iba a ser peronista!

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Me imagino al empresario con gemelos de oro en la camisa escuchar al delegado de la fábrica, un morochito con un escarbadiente en la boca citándole con lenguaje de abogado, reclamar aumento de sueldos, vacaciones pagas, aguinaldos y doble indemnización ¡Como no iba ser gorila!

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HUGO ARANA

Como no transito las redes sociales, esta es mi manera de recordarlo.

Un autor escribe una obra sabiendo que el destino es el escenario, es decir los actores. Ocurre a veces que el actor eleva el personaje más allá de la imaginación del que lo escribe, un gesto, una entonación, a veces un agregado definen el personaje. Hugo Arana representó mi obra “El Saludador”  en el teatro San Martín. Gracias, Hugo.