Alberto Cormillot renunció a su cargo en el Ministerio de Salud que encabeza el cuestionado Jorge Lemus. El médico nutricionista aseguró en declaraciones radiales que abandonó la coordinación del área de Alimentación Saludable, cargó que asumió en junio de 2016, al no contar “ni siquiera con una caja chica”. Tiempo atrás, el panelista del programa televisivo Cuestión de Peso quedó envuelto en un escándalo: durante la vigencia del programa de Precios Cuidados, Cormillot intervino en la confección del listado de productos e incluyó algunos de la marca que lleva su nombre.
La renuncia del nutricionista se suma a la del viceministro Néstor Pérez Baliño, ocurrida en enero de este año. También, al despido de varios funcionarios de carrera durante 2016, en medio de denuncias por recortes presupuestarios y subjecución de partidas para inversiones.
“Es la primera vez que renuncio a algo en mi vida. Acá, desde que entré, sabía que era un espacio con poco conocimiento por parte del público y con varias dificultades. Por ejemplo: nunca tuvimos presupuesto ni una caja chica, y ya llevábamos más de un año de trabajo”, expresó el médico a Radio El Mundo.
El conflicto, indicó Cormillot, nació “a partir de un cambio de autoridades”. El nutricionista más mediático del país, ex ministro de Acción Social bonaerense durante el gobierno de Antonio Cafiero, explicó que “ingresó un nuevo secretario con políticas distintas” y agregó que la idea era “armar un Instituto Argentino de Alimentos y Nutrición, para que quedara un espacio visible en el Estado que se dedicara a la alimentación, como tiene Chile y los grandes países”. Cormillot confirmó que seguirá con aquel proyecto, esta vez, “desde la escena privada, con una fundación”, reconoció las limitaciones que tiene una ONG en relación al aparato estatal e indicó que “el Estado debe tener mayor presencia en la promoción de la alimentación saludable”.
Precisamente, una de las tareas centrales del Programa Nacional de Alimentación Saludable –publicado en el Boletín Oficial el 6 de junio del año pasado– se centra en la instrumentación de “campañas informativas relativas a los trastornos alimentarios”. Según indicó Cormillot, ahora ex coordinador del área, para esa misión de concientización “faltó el apoyo de las redes sociales, del marketing y de la comunicación”. “Así es muy difícil”, expresó.
La estadía del nutricionista y columnista radial por la cartera de Salud que conduce Lemus no estuvo exenta de polémicas. El 6 de septiembre del año pasado, el gobierno nacional anunció una prórroga del programa de Precios Cuidados, esta vez, con una actualización elaborada por Cormillot. La novedad fue la incorporación de “productos saludables”, entre los que aparecían aceitunas negras y dulces de batata y membrillo. Todos alimentos “light” de la marca que lleva su nombre. Luego de las críticas, la Secretaría de Comercio tuvo que retirar esos bienes del programa.
Pero eso no fue todo. Días después de la confección del listado con sus propios productos, se conoció que la empresa Coca-Cola, una de las compañías más cuestionadas por el aumento de la obesidad, entregó casi 100 mil dólares, en 2015, a la Fundación ALCO, fundada por Cormillot y aún ligada a la firma del médico. La donación tuvo como objetivo financiar un proyecto que, justamente, fomentaba “la prevención de enfermedades relacionadas al estilo de vida y la obesidad infantil”.