Con la pandemia cada vez más diseminada por el interior del país, el presidente Alberto Fernández resolvió ayer con los gobernadores de ocho de las provincias más afectadas prorrogar las medidas de restricción por otras dos semanas. En verdad, cada uno resolverá cuánto tiempo y qué medidas tomará, pero hubo consenso en que es necesario sostener el aislamiento. "Lo único que ordena el cuadro es que la gente circule menos", insistió el Presidente en zoom desde la Casa Rosada. Es muy probable que Fernández haga el anuncio hoy durante su visita a Misiones, curiosamente una de las provincias con menos problemas por la pandemia.
La nueva situación se corrobora día a día con cada nuevo parte. Luego de varios meses en que los contagios estaban centrados casi con exclusividad en el AMBA, el virus se expandió y hoy la mayoría de los casos se producen en el interior. Ayer se registraron 16.325 casos y 438 fallecidos en todo el país. Pero mientras la ciudad de Buenos Aires tuvo 566 casos, en Santa Fe se registraron 2.536, en Córdoba 1.857, en Tucumán 1.417 y en Mendoza 936 casos.
"En Córdoba y Santa Fe vemos una meseta alta", detalló el Presidente sobre el panorama de los últimos días. Insistió en marcar el ejemplo de Jujuy, como una provincia que no tuvo casos durante más de tres meses en los que abrió muchas actividades. Después ingresó el virus y sólo pudo contener su expansión cuando -a punto de llegar a la saturación del sistema sanitario- resolvió cerrar todo por 21 días. También repasó lo que está sucediendo en Europa, donde muchos países se vieron obligados a retomar las restricciones. "Macron me explicó que tuvo que disponer el toque de queda por la noche", comentó sobre la comunicación de días atrás con el presidente de Francia.
Fernández mantuvo ayer un encuentro virtual con los gobernadores de las provincias que concentran el 55 por ciento de los casos: Juan Schiaretti (Córdoba), Arabela Carreras (Río Negro), Rodolfo Suárez (Mendoza), Alberto Rodríguez Saá (San Luis), Omar Gutiérrez (Neuquén), Mariano Arcioni (Chubut), Omar Perotti (Santa Fe) y Juan Manzur (Tucumán). Junto al Presidente se sentaron el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, el ministro de Salud, Ginés González García, y el secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello.
"Las medidas que se tomaron hace 14 días fueron oportunas", intervino Ginés. "Se debe continuar por este camino porque hay lugares que el cumplimiento no es efectivo", agregó. Indicó que el camino es prevenir y acelerar la puesta en práctica del plan Detectar Federal que va en busca de los infectados. "El Detectar es clave", avisó, repasando la experiencia de estos meses en el área metropolitana. Ginés explicó que repite estas mismas directivas en los encuentros del consejo que reúne a todos los ministros de Salud del país, el Cofesa, que debido a la pandemia es convocado de manera semanal.
Manzur adelantó que en Tucumán la decisión será mantener las restricciones por otras dos semanas. "La ciudad de San Miguel de Tucumán continúa en la fase de aislamiento y hemos bloqueado la circulación entre los municipios para evitar más contagios. Nuestro sistema de salud continúa con camas disponibles y cuadruplicamos los testeos a la población", contó. Tucumán entre miércoles y jueves promedió los 1.500 casos diarios, muchos para su población. "Hemos llegado al peor momento de la pandemia", afirmó Rodríguez Saá, quien advirtió sobre lo acertado que había sido el análisis del Presidente cuando anunció la última prórroga y advirtió lo que venía.
Perotti aseguró que en las últimas horas habían registrado "una pequeña señal de mejora" en Santa Fe, pero que continuarán con el mismo esquema de medidas por otros 14 días. "Más allá del cansancio de todos vamos a seguir con las restricciones de movilidad a partir de las 20 horas", adelantó. Schiaretti también informó que seguirá con las medidas restrictivas en el horario nocturno. El gobernador de Mendoza también definió el estado de su provincia como de "meseta alta" y que en el Gran Mendoza la ocupación de camas llegaba al 92 por ciento.
Los gobernadores de Río Negro, Neuquén y Chubut mostraron un cuadro más complejo aún. "Queremos continuar en el ASPO y sumar a Viedma y Dina Huapi", adelantó Arabela Carreras. Arcioni contó que en Chubut hay casos hasta en poblaciones pequeñas de 300 habitantes. "Hay localidades con ocupación UTI muy altas", advirtió. Gutiérrez explicó que en Neuquén necesitaban "más médicos y hacer más testeos".