A la hora de hacer un balance sobre el estado de la provincia en el momento en que inició su gestión, el gobernador Axel Kicillof destacó, entre otras cosas, que entonces en Buenos Aires no existía "un mapa de la disponibilidad de tierra pública y privada para la ampliación de la oferta. Era la nada misma y sobre ella montados muchísimos negocios privados". Entre ellos, “la mayoría de los barrios privados y countries no están habilitados, entonces no pagan impuestos. Son prácticamente ocupaciones de tierra. Hay que regularizarlo”. La oposición eligió ubicar sus palabras en el marco de la toma de Guernica, y las reinterpretó como un aval a la "usurpación de tierras" y "un ataque a la propiedad privada". Como respuesta, funcionarios bonaerenses denunciaron la manipulación mediática y política de los dichos del gobernador.
La frase de Kicillof fue convenientemente recortada de manera que parecía que comparaba la toma de tierras en Guernica con los barrios privados de la Provincia. "Kicillof cruzó la raya de la racionalidad política. Avalar la toma de tierras con argumentos extraviados solo genera más incertidumbre y promueve inseguridad legal", denunció el diputado de Juntos Por el Cambio, Cristian Ritondo. "Primero la inacción en Guernica. Ahora el gobernador pone en duda la propiedad privada. Estas ideas atrasan y fracasaron", acusó, por otro lado, el ex ministro de Economía de De La Rúa, Ricardo López Murphy.
Desde el gobierno bonaerense respondieron con dureza al recorte de las declaraciones de Kicillof. "No sobreactúe diputado y lea la entrevista: el gobernador alude a la situación irregular en la que se encuentran algunos barrios privados y que ayudaremos a poner al día", le respondió el jefe de Gabinete bonaerense, Carlos Bianco, a Ritondo a través de Twitter. En el mismo tono, la ministra de Gobierno, Teresa García, también salió a contestarle al jefe de la bancada del Pro: "¿Usted leyó la nota? ¿Por qué miente? Usted y la ex gobernadora dejaron sin convalidar miles de nuevas urbanizaciones. Y esos bonaerenses no pueden escriturar", le recriminó a través de las redes sociales.
Específicamente sobre la toma de Guernica, Kicillof destacó que más de 600 familias que estaban asentadas en el predio "firmaron un compromiso con la provincia", tras lo cual se había realizado "un desalojo voluntario". El gobernador hizo hincapié en el deseo de la administración de buscar "una manera pacífica" de resolver el conflicto, aunque resaltó que "la toma de terrenos privados es ilegal" y que había que resolver el problema de vivienda "en el marco de la ley".