Por quinto día consecutivo, miles de manifestantes se concentraron en Varsovia y otras ciudades para repudiar el veredicto del Tribunal Constitucional, que este jueves prohibió el aborto en casos de malformación del feto, una de las pocas opciones para la interrupción legal del embarazo vigentes en Polonia.
Tras el veredicto del Constitucional, en respuesta a una demanda presentada hace tres años por un centenar de diputados de Ley y Justicia (PiS), el principal partido de derecha en Polonia, las posibilidades de acceder a un aborto legal quedaron reducidas a casos de violación, incesto o grave riesgo para la salud de la madre.
Tras conocer la decisión del Tribunal, miles de mujeres salieron a las calles para denunciar la vulneración de derechos que significa la nueva prohibición. Las marchas, iniciadas el jueves, se mantenían hasta este lunes en distintas ciudades del país.
Las manifestaciones más grandes se produjeron en el centro de la capital polaca, que quedó cercada por un amplio despliegue policial. Dos de los lugares de mayor concentración fueron la sede de la Corte y las inmediaciones del domicilio del líder del ultraconservador partido PiS y viceprimer ministro, Jaroslaw Kaczynski.
Si bien la primera respuesta de la Iglesia Católica polaca fue celebrar y acompañar el fallo del Tribunal, luego de las protestas que se registraron frente a varios templos, la institución se inclinó este lunes por el camino del diálogo: "Hay que encontrar el camino entre el derecho a la vida y la protección de la mujer", afirmó el titular de la Conferencia Episcopal, el arzobispo Staliskaw Gadecki, quien luego condenó las "expresiones vulgares y agresivas" de algunas protestas.
Este domingo, a las marchas silenciosas frente a las iglesias se sumaron algunos enfrentamientos con los fieles. En Poznan (oeste del país) un grupo de veinte activistas irrumpieron en el interior de la catedral con carteles a favor del aborto libre.
Polonia es uno de los países de la Unión Europea (UE) con mayores restricciones para ejercer el derecho al aborto. Según los datos del Ministerio de Sanidad, en 2019 se practicaron en Polonia (con casi 38 millones de habitantes) apenas 1110 abortos legales, 96% de los cuales fueron por malformación del feto.