Esta noche, la luna se podrá ver mucho más grande que de costumbre. El motivo: pasará por el punto más cercano a la Tierra, cosa que sucede tres o cuatro veces al año. Pero esta vez, además, coincide con la fase luna llena del satélite, lo que provocará el fenómeno conocido como Superluna. Algo que no sucede desde 1948; la próxima será en 2034.
“Esta súper luna será especialmente "súper" porque es la luna llena más cercana a la Tierra desde 1948”, compartieron el entusiasmo desde la Nasa, quienes explicaron de qué se trata el fenómen: “La órbita de la luna alrededor de la Tierra es ligeramente elíptica así que a veces está más cerca y a veces más lejos. Cuando la luna está llena y hace su pase más cercano a la Tierra se conoce como superluna”.
Cerca y brillante, así se verá la luna tras la puesta del sol. El satélite estará un 14 por ciento más cerca de lo habitual, unos 35.400 kilómetros. Esto provocará que la luna llena se vea con un diámetro mayor y con un 30 por ciento más de brillo.
El término Súper Luna fue acuñado en 1979 por el astrólogo estadounidense Richard Nolle, quien auguró que podría verse una en 2011 y que traería aparejado un aumento de terremotos. Si bien la predicción nunca sucedió, el término se volvió popular y generó expectativas entre los amantes de los astros.
Las fotos de una luna redonda, enorme y hasta amarilla comenzaron a circular por las redes sociales desde ayer a la noche, dado que en algunos países se pudo observar el domingo.
Falsas expectativas
Desde el Planetario de Buenos Aires pusieron paños fríos sobre el asunto. “Hay que aclarar que este término no sólo es completamente exagerado sino que, además, está generando falsas expectativas. De ningún modo veremos una luna gigante en el cielo. Ni nada excepcional”, dijeron.
Según explicaron los astrónomos, la diferencia en relación a los 384 mil kilómetros de distancia media que tiene la luna con el planeta será “tan exigua”, que a simple vista no se podrá observar muy diferente con otras lunas llenas.
“Para cualquier observador será igual a todas las lunas llenas que hemos visto y veremos en el futuro. Por supuesto siempre vale la pena observar a nuestro satélite, porque es una inagotable fuente de curiosidad e inspiración”, intentaron no desalentar por completo a todos lo que esperaban la luna gigante de esta noche.