La decisión del Tribunal Penal 1 de Eldorado, Misiones, de condenar a 20 años de prisión a María Ovando por "haber permitido o no haber impedido el abuso sexual" de una de sus hijas y una de sus nietas produjo un fuerte rechazo de abogadas y organizaciones feministas que reclamaron por la falta de perspectiva de género con la que se la juzgó. "Decisiones judiciales como esta ponen al descubierto el patriarcado judicial que habilita una doble vara para juzgar con mayor severidad a quien consideran omitió obligaciones de cuidado y es “mala madre” al no haber evitado el abuso de sus hijas, que a quienes efectivamente son autores del abuso", señaló la abogada feminista Soledad Deza.
Si bien los fundamentos del fallo aún no se dieron a conocer, las abogadas consultadas por este diario coincidieron en que tanto la sentencia como la actitud de la justicia durante todo el proceso judicial estuvieron marcados por la falta de perspectiva de género. En este sentido, Deza dijo que esta falta de perspectiva "es violenta, y se expresa en estos castigos morales que echan mano a la herramienta penal para profundizar la miseria de la desigualdad estructural y el abandono estatal. Ahí hubo un Estado que abandonó varias veces a María y su familia".
La letrada recordó que "Misiones es la tierra de Cristina Vazquez que pagó con su libertad y su vida este tipo de administración de (in)justicia", y advirtió que "es alienante que no se comprenda que el análisis de los contextos que rodean los conflictos y una mirada libre de estereotipos sexistas son la clave para incorporar la perspectiva de género en el derecho, y mucho más preocupante es que no se advierta que juzgar con perspectiva de género es una obligación estatal, no un acto discrecional".
En la misma línea, la abogada Sabrina Cartabia dijo a Página/12 que "trabajar con perspectiva de género es un mandato constitucional y de derechos humanos, no es algo que se nos ocurre a las feministas sino que esta en nuestra Constituición Nacional, que incorporó los pactos de derechos humanos. Y esto está tanto en la Convención de Belém do Pará como en la convención que prohíbe toda forma de discriminación hacia las mujeres". La abogada sostuvo que cuando no se juzga con perspectiva de género, el trabajo del Poder Judicial se cimenta "sobre todo en prejuicios y en estereotipos de género. Uno de esos es la cuestión de cómo debe ser ejercida la maternidad, entonces se configura el estereotipo nocivo de la la mala madre donde dejan de importar los hechos, el derecho y la prueba, en los que deben fundarse los fallos para no ser arbitrarios, y se pasa a dirigir la investigación y los razonamientos judiciales en virtud del estereotipo. Y el hecho de que le hayan impuesto una pena más grande a ella como cuidadora que a los que abusaron marca que es un caso donde se trabajó con estereotipo de género".
Mientras en las redes sociales los rechazos a la sentencia se multiplicaban, Julia Mosquera, integrante de Abofem ( Asociacion de Abogadas Feministas), dijo a este diario que "la condena era esperable teniendo en cuenta la actitud que tuvo tanto la justicia Penal como la justicia de Familia con una mujer que estuvo, primero, un año presa porque una de sus doce hijas falleció a los tres años por desnutrición, y después fue perseguida por la justicia de Familia. Una mujer que hizo lo que pudo, totalmente analfabeta, en un estado de pobreza total y sometida a violencia institucional, porque trabajaba para el Estado picando piedras y sin embargo ese mismo Estado no intervino con los organismos proteccionales y le cerró todas las puertas, al punto que quiso ir a la escuela nocturna y la jueza le prohibió estudiar porque no podía andar de noche con los niñes que eran menores de edad. Y como si fuese poco, ahora la culpan y la condenan a 20 años, una pena mayor que la de los abusadores. Si tengo que decir algo, es que esta sentencia es la sentencia del estereotipo de género construido en base a la mala madre, que no existe como tal, pero sí para la justicia".
La abogada criminóloga Raquel Hermida Leyenda señaló que "en todos lo casos se busca una mujer para justificar crímenes que realizan los hombres en ciertas provincias absolutamente patriarcales, y en el caso de María se la pretende usar para justificar los horribles crímenes que leemos todos los días en los distintos lugares de nuestro país".