Después de que la Corte anulara su excarcelación, el Tribunal Oral Federal 1 de San Martín ordenó la detención del exsecretario general del Ejército Eduardo Alfonso, que deberá volver a ser juzgado por el asesinato del militante Domingo García, ocurrido en enero de 1977. Alfonso ya fue juzgado por los secuestros de la compañera de García, Beatriz Recchia, y su hijita de tres años, Juliana.
El jueves, los jueces supremos Ricardo Lorenzetti, Elena Highton, Horacio Rosatti y Juan Carlos Maqueda dijeron que correspondía anular la excarcelación que la Sala II de la Cámara Federal de Casación le había otorgado a Alfonso en 2018. El único que votó en disidencia fue el presidente de la Corte, Carlos Rosenkrantz, algo que, a esta altura, es un clásico en los casos de lesa humanidad. La mayoría de la Corte se remitió al dictamen del procurador interino Eduardo Casal, que --en línea con el camarista Alejandro Slokar-- resaltaba los riesgos procesales de tener a Alfonso en libertad después de que hubiera estado prófugo cerca de cuatro años.
Abuelas de Plaza de Mayo y Juliana García se presentaron ante el TOF 1 de San Martín para pedir la detención inmediata de Alfonso. Los jueces Daniel Omar Gutiérrez, Silvina Mayorga y Matías Mancini le encomendaron a la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) la detención del represor de 72 años.
Al cierre de esta edición, Alfonso ya estaba detenido. El represor se presentó espontáneamente en la sede de PSA de Aeroparque cuando los móviles de esa fuerza ya se movilizaban hasta el country Estancias del Pilar - Barrio Champagnat, donde vive. Después de los estudios médicos de rutina, Alfonso quedará a disposición del Servicio Penitenciario Federal (SPF). Es probable que sea alojado en la Unidad 34 de Campo de Mayo, estimaron desde la cartera de Justicia.
Alfonso estuvo detenido en 2008, pero, al año siguiente fue sobreseído por la Cámara Federal de San Martín. Cuando Casación Federal se disponía a anular ese sobreseimiento y ordenar nuevamente su detención, Alfonso se dio a la fuga. Estuvo prófugo entre 2012 y 2016. Viajó a Paraguay y atravesó las fronteras con documentación falsa. Desde Abuelas remarcaron que aún resta saber con qué apoyos lo hizo. Alfonso conserva influencias ya que fue el secretario general del Ejército durante los gobiernos de Fernando de la Rúa y de Eduardo Duhalde. Finalmente se entregó durante el gobierno de Macri.
Alfonso participó el 12 de enero de 1977 de un violento allanamiento en la casa de Villa Adelina donde vivían Domingo García con Beatriz Recchia y su hijita, Juliana. A Domingo lo asesinaron y lo enterraron como NN en el cementerio de Boulogne. A Beatriz, que estaba embarazada, la llevaron al centro clandestino conocido como El Campito, donde dio a luz a una beba, que recuperó su identidad en 2009. A Juliana la llevaron a la comisaría de la zona y luego la entregaron a su abuela materna.
En 2017, el TOF 1 de San Martín lo condenó a cuatro años por los secuestros de Beatriz y de Juliana, pero lo absolvió por el homicidio de Domingo. El legajo de Alfonso acredita que el 12 de enero de 1977 fue herido en un operativo: recibió un impacto de bala en el intestino. Por ese operativo recibió una medalla al herido en combate.Casación consideró que debe volver a ser juzgado por el homicidio de Domingo García.