El Presupuesto 2021 que el Gobierno de Alberto Fernández consiguió aprobar esta semana depara buenas expectativas para Santa Fe, más allá de la ya conocida decisión política de expresar en la ley el compromiso de saldar la deuda histórica por coparticipación, de acuerdo con el fallo de la Corte Suprema de 2015. El año próximo Nación incrementará en un 20 por ciento real (inflación descontada) la inversión en obra pública para esta provincia, sumará además nuevos aportes fuertes en planes habitacionales, y en programas recuperados como el Procrear y el Fondo Nacional de Incentivo Docente. En la asignación de recursos, Santa Fe espera 340.260 millones de pesos a lo largo de 2021, más que durante 2019 aun contando la inflación.
Estas variables positivas son conclusiones que hizo el Centro de Estudios Sociales y Económicos Scalabrini Ortiz (Ceso) sobre la participación de Santa Fe en la ley de Presupuesto 2021. Marca que la inversión pública de Nación en territorio santafesino prevé incrementarse un 50% en términos nominales y un 20% descontando la inflación. Santa Fe sigue ocupando el cuarto lugar en términos de destino del gasto geográfico de Nación, luego de Ciudad de Buenos Aires, Provincia de Buenos Aires y Córdoba.
En términos nominales, Nación aumentó este año sus erogaciones en Santa Fe por 60% más que en 2019, explicado por la batería de ayuda social (IFE, ATP, refuerzo AUH, etc) en el marco de la crisis sanitaria. Así y todo, el abanico de aportes presupuestados para 2021 a Santa Fe suman 340.260 millones de pesos, y eso es un 24,5% más que este año de emergencia. Comparado con el 2019, será 102% más, es decir, por encima de cualquier cálculo de inflación.
"Hay un importante crecimiento del gasto de capital, la inversión pública que Nación hará en Santa Fe en términos reales descontado la inflación será de un 60% más. Es el gran dato porque Nación en todo el presupuesto está previendo un fuerte incremento de la inversión como motor de la reactivación económica a través de la obra pública", destacó Celina Calore, coordinadora del informe y economista del Ceso.
El ítem de obra pública reserva $10.693 millones para Santa Fe, en su mayoría asignados a obras viales. Ahí resaltan partidas para la conversión de la ruta nacional 34 en autopista, en el tramo Angélica - Sunchales, por $4200 millones, y otros $1461 millones en el rubro "Construcción de Autopistas, Rutas Seguras, Rehabilitación, Mantenimiento, Operación y Financiación de Rutas Nacionales N° 9 y 33”.
Claro que la mayor transferencia de recursos nacionales estará dada vía Anses, en cuestión de programas sociales y asignaciones familiares, pero el análisis del Ceso destaca la incidencia que en 2021, acaso el año de pospandemia, tendrán otras asistencias del gobierno central.
En la cuenta aparece en este presupuesto --el primero que elabora la gestión Fernández-- partidas del nuevo Ministerio de Hábitat como el nuevo Procrear ($1200 millones) y viviendas sociales por otros $2700 millones. Y eso se suman otros ítems como la Tarjeta Alimentar, la recuperación del Fonid (incentivo docente) que estuvo pausado durante el gobierno de Mauricio Macri.
Fuera de los recursos orientados a fines específicos, el gobierno también incrementó la tajada santafesina de la coparticipación federal de impuestos. Serán en 2021 $249.696 millones de pesos que retornarán a las arcas de la Casa Gris. Eso equivale a 37% interanual, pero en términos nominales. Hay que descontarle el 29% de inflación estimada para el año próximo, y entonces resulta que Santa Fe recibirá 8% más de coparticipación. De esta manera, se revierte la disminución que registraba en 2018 y 2019.
Renglón aparte de este incremento de coparticipación, el Ceso subraya la inclusión por primera vez en la ley de presupuesto del compromiso del Ejecutivo en cumplir con la sentencia de la Corte Suprema de la Nación en contemplar el pago de la deuda que tiene con Santa Fe por la detracción indebida de 15% de masa pre coparticipable. "El artículo es enunciativo, pero es significativo. Lo que falta es que la Corte se expida para determinar el monto de la deuda. Porque el fallo en 2015 salió a favor, y Santa Fe eligió negociar que le paguen mientras que San Luis por ejemplo judicializó y ya cobra. Por eso venimos con un delay", recordó Calore.
La economista opinó ante la consulta de Rosario/12 sobre el código político de este presupuesto. "Es un presupuesto de transición entre lo que fue un gobierno neoliberal, este año con pandemia y la idea de transitar hacia otro modelo económico. No es agresivo en términos de gasto; proyecta un déficit pero recortado. Creo que es razonable dentro del contexto actual, con caída de recursos fiscales, la reestructuración pendiente de la deuda con el FMI y el intento por salir de una crisis muy importante. Es un presupuesto para contener la situación y que no crezcan los indicadores de pobreza y desempleo. No es una reconstrucción de posguerra, es una reactivación con presencia del Estado en obra pública", concluyó.