La escritora y actriz Camila Sosa Villada, esa cordobesa que habla como si tuviera una mexicana infiltrada en la lengua, ganó el Premio Sor Juana Inés de la Cruz que otorga anualmente la Feria Internacional del Libro de Guadalajara por su novela Las malas, una historia que reivindica la furia y la alegría de ser travesti. El jurado integrado por las escritoras mexicanas Ana García Bergua y Ave Barrera y el editor y ensayista venezolano Daniel Centeno Maldonado le otorgó este reconocimiento, dotado de 10 mil dólares, por “la gran destreza narrativa, la originalidad del ambiente y la fuerza de los personajes que retrata” y destacó también que se trata de “un texto rudo y a la vez hermoso” y que “este extraño equilibrio lo convierte en una obra sobresaliente, cargada de lirismo, rabia y redención”. La primera novela de Sosa Villada, publicada por Tusquets en 2019 y traducida al alemán, francés, noruego y croata, entre otras lenguas, será adaptada al formato de serie por Armando Bó.
“El lenguaje es mío. Es mi derecho, me corresponde una parte de él. Vino a mí, yo no lo busqué, por lo tanto, es mío. Me lo heredó mi madre, lo despilfarró mi padre. Voy a destruirlo, a enfermarlo, a confundirlo, a incomodarlo, voy a despedazarlo y a hacerlo renacer tantas veces como sean necesarias, un renacimiento por cada cosa bien hecha en este mundo”, se lee en Las malas, que cuenta en primera persona la historia de un grupo de travestis que se prostituyen en el Parque Sarmiento (Córdoba), novela que también compite en la lista corta del premio Fundación Filba Medifé, cuya ganadora o ganador se anunciará el próximo 12 de noviembre. Sosa Villada es la séptima escritora argentina en obtener el Premio Sor Juana Inés de la Cruz, un galardón que reconoce a la literatura escrita por mujeres y que han ganado, en otras ediciones, María Gainza, Perla Suez, Inés Fernández Moreno, Claudia Piñeiro, Tununa Mercado, Ana Gloria Moya y Sylvia Iparraguirre.
“Las malas es ficción y realidad trabajada en el molcajete del oficio y la inspiración”, precisó el jurado sobre la obra de Sosa Villada, que obtuvo el premio por unanimidad entre las 67 candidaturas provenientes de Argentina, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, España, Italia, México, Perú, Puerto Rico, República Dominicana y Venezuela. La escritora argentina recibirá el premio el miércoles 2 de diciembre a las 17 horas (México), en una ceremonia virtual que será transmitida en la página web de la FIL y en las redes sociales. Antes de que se publicara la novela premiada, Sosa Villada visitó la FIL Guadalajara en 2018 de la mano de otro gran libro: El viaje inútil, publicado por Ediciones DocumentA/Escénicas, donde rastrea el origen de su escritura y el impacto paradójico que tiene el poder de la lectura y de la palabra escrita en el ecosistema de una familia humilde.
Sosa Villada (La Falda, 1982) estudió Comunicación Social y Teatro en la universidad de Córdoba. En 2009 estrenó la obra teatral Carnes tolendas, retrato escénico de un travesti, donde combinó la poesía y el teatro de Federico García Lorca con los textos de su blog La novia de Sandro, título de su primer libro de poemas, publicado en 2015 por Caballo Negro y recientemente reeditado por Tusquets. Trabajó en la película Mía (2011), de Javier Van de Couter, y en la miniserie La viuda de Rafael (2012). También escribió y protagonizó el espectáculo performático Llórame un río, evocaciones dramáticas sobre Tita Merello y Billie Holiday. “Las malas es un relato de infancia y un rito de iniciación, un cuento de hadas y de terror, un retrato de grupo, una manifiesto político, una memoria explosiva, una visita guiada a la fulgurante imaginación de su autora y una crónica distinta de todas, que viene a polinizar la literatura", plantea Juan Forn en el prólogo de la novela premiada. "En su adn convergen las dos facetas del mundo trans que más repelen y aterran a la buena sociedad: la furia travesti y la fiesta de ser travesti”.
En Las malas, la escritora retrató la singularidad del mundo de las travestis con las que convivió en Parque Sarmiento. “Era necesario escribir sobre esas travestis como las últimas revolucionarias, como la última bohemia que conocí”, planteó Sosa Villada al suplemento Radar. La novela de Sosa Villada es tan indispensable como imposible de olvidar. Nadie sale indemne ante tanta belleza y rabia.